Ciudad de México.
Tras la captura de Joaquín el “Chapo” Guzmán, más de 40% de la población mexicana espera que sea extraditado a EUA; sin embargo, el Gobierno de Enrique Peña Nieto indicó que esta no es su prioridad.
Así lo externó ayer el secretario de Gobernación de México, Miguel Ángel Osorio Chong, quien afirmó que más importante que la deportación a Estados Unidos del líder del cartel de Sinaloa es la información que el capo les pueda dar.
Aunque la extradición “es un caso que hay que atender”, todavía faltan “algunas tareas para desarticular completamente su sistema financiero y logístico”, así como los de sus aliados, defendió el ministro.
“Creo que en este momento es más importante la información que nos pueda dar y que nos ayude a generar la tranquilidad en toda esta zona en la que tiene o tenía influencia”, continuó. Avanzó que será “muy largo” el proceso de extradición a EUA, donde enfrenta numerosos cargos, y frente al cual han estando protegiéndolo los abogados del cartel de Sinaloa, debido a todos los amparos que su defensa ha tramitado.
Ni Hitler
En tanto, José Luis González, uno de lo abogados del capo, denunció que el Chapo está “totalmente incomunicado”, pues no tiene acceso a su familia ni a sus abogados, está “vigilado las 24 horas, no puede tomar sus alimentos (y) no puede dormir, ni a Hitler lo tendrían así”. Señaló que las autoridades “han exagerado las reglas establecidas dentro de un penal” como el Altiplano, al que el Chapo regresó el viernes pasado tras ser recapturado en Sinaloa seis meses después de haberse fugado del mismo recinto, y violan sus derechos humanos.
Tras la captura de Joaquín el “Chapo” Guzmán, más de 40% de la población mexicana espera que sea extraditado a EUA; sin embargo, el Gobierno de Enrique Peña Nieto indicó que esta no es su prioridad.
Así lo externó ayer el secretario de Gobernación de México, Miguel Ángel Osorio Chong, quien afirmó que más importante que la deportación a Estados Unidos del líder del cartel de Sinaloa es la información que el capo les pueda dar.
Aunque la extradición “es un caso que hay que atender”, todavía faltan “algunas tareas para desarticular completamente su sistema financiero y logístico”, así como los de sus aliados, defendió el ministro.
“Creo que en este momento es más importante la información que nos pueda dar y que nos ayude a generar la tranquilidad en toda esta zona en la que tiene o tenía influencia”, continuó. Avanzó que será “muy largo” el proceso de extradición a EUA, donde enfrenta numerosos cargos, y frente al cual han estando protegiéndolo los abogados del cartel de Sinaloa, debido a todos los amparos que su defensa ha tramitado.
Ni Hitler
En tanto, José Luis González, uno de lo abogados del capo, denunció que el Chapo está “totalmente incomunicado”, pues no tiene acceso a su familia ni a sus abogados, está “vigilado las 24 horas, no puede tomar sus alimentos (y) no puede dormir, ni a Hitler lo tendrían así”. Señaló que las autoridades “han exagerado las reglas establecidas dentro de un penal” como el Altiplano, al que el Chapo regresó el viernes pasado tras ser recapturado en Sinaloa seis meses después de haberse fugado del mismo recinto, y violan sus derechos humanos.
El secretario negó tajantemente estas acusaciones, dijo que tal incomunicación no existe y que, como constata el registro, el martes se entrevistó con uno de sus abogados.
“Se le está dando un trato como a cualquier otro interno, se le están dando sus alimentos y medicinas”, afirmó.
Sucesión
Pese a que el Chapo se encuentra tras las rejas, el cartel de Sinaloa continúa sus operaciones delictivas. Tras la captura del capo, el control de la organización quedó en manos de su socio Isma el “Mayo” Zambada, que compartirá el mando con Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán, hijos del narcotraficante, según expertos en temas del crimen organizado. Además, mientras el Chapo siga en una prisión mexicana y no sea extraditado a EUA, él también seguirá coordinando las tareas delictivas desde la cárcel, apuntan las mismas fuentes.
“Cada uno de ellos tiene una función. El propio “Mayo” Zambada se ha dedicado a ciertas actividades dentro de la organización. Habrá otros que se encarguen del cultivo de la droga, del traslado, unos de los sicarios y otros del dinero”, explicó Martín Barrón, experto en temas de seguridad, al diario español El País.
Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, de 32 y 27 años, enfrentan acusaciones por tráfico de drogas en tribunales estadounidenses. Para los expertos serían los sucesores naturales porque el cartel funciona como una empresa familiar, donde los cargos se van heredando de padres a hijos.
