Stephan Ordóñez, el hondureño que triunfa como fotógrafo profesional en Canadá

Stephan Ordóñez es un compatriota hondureño, de 37 años, que dejó su natal San Pedro Sula para asentarse en el extranjero con la esperanza de encontrar mejores oportunidades y así poder cumplir sus más ansiados sueños profesionales.

El hondureño radica desde hace ocho años en la ciudad de Toronto, Canadá, donde destaca como un excelente fotógrafo profesional de grandes celebridades de la música, el cine, fútbol, moda y otros rubros.

En una entrevista exclusiva con Diario LA PRENSA, Stephan nos cuenta cómo es su estilo de vida en Canadá, lo que más extraña de Honduras, la experiencia adquirida como fotógrafo profesional y su lista de proyectos a futuro.

Cuéntanos un poco, ¿cómo ha sido tu vida en esta tierra (Canadá)?

Vivir aquí en Canadá es lo máximo. Primero intentamos en Miami (Estados Unidos), pero a mi mamá no le gustó mucho. Ella tenía unas amistades aquí en Toronto y nos vinimos y gracias a Dios las cosas se nos dieron acá. Aunque el frío aquí es otra cosa. No se lo recomiendo a nadie. Pregúntale a los de la Selección cuando vienen a jugar acá (Canadá). Es un frío que da miedo.

¿De dónde eres originario en Honduras?

Somos de San Pedro Sula y déjame decirte que llevo años aquí en este país (Canadá) y el frío nunca se me va a quitar. Hasta los pensamientos se te congelan acá.

¿Cómo te mantienes conectado con la cultura hondureña? Veo que a pesar de tantos años de vivir en Canadá, todavía puedo sentir el acento hondureño e inclusive esas características de cada uno de nosotros.

Bueno, mi mamá me mandó a estudiar a Honduras para que aprendiera español, porque ya estaba un poco “agringado”. Allá estudié en el Politécnico, en el Reyes y en el ITE. Entonces, aprendí un poco de mi cultura, por ejemplo no olvido el pollo con tajadas y las baleadas.

En San Pedro Sula nació mi amor por el fútbol, por mi abuelo, porque me acuerdo de que era el partido de Honduras contra México para el Mundial de 1998, en el Morazán, y por ese partido es que me encanta el fútbol.

¿Cuéntanos acerca de cómo empezó esa pasión por la fotografía?

La pasión empezó porque a mí me gustaba mucho la ciudad de Toronto, pues yo sentía que nadie le daba el amor que corresponde. Todo el mundo hablaba de Nueva York, Miami y Los Ángeles, pero yo miraba mi ciudad tan linda y dije: ´no, yo quiero tomar las fotos y darle un aspecto diferente´. Ahí fue cuando me miraste la primera vez, yo pensaba que era una broma cuando me dijeron que LA PRENSA me quería entrevistar.

Yo me quedé así como que, ´no, esto tiene que ser una broma´. Uno de mis primos me está haciendo una broma ya. Y gracias a Dios, pues salió y ahí comencé. Yo me acuerdo de que en esa entrevista dije que mi mayor anhelo era la música, o sea, la industria de la música y las películas. Y ahí fue cuando, es más, muchas de las cosas que dije que quería hacer, gracias a Dios, ya se me dieron.

Pude trabajar en los conciertos que quería, pude trabajar con el artista que soy más fanático: The Weeknd. Empecé a trabajar con Soccer Bible, una compañía de Inglaterra, que yo fui fanático desde que era chiquito. Yo le tomo las fotos a la Selección de Canadá, al equipo de Toronto FC, y gracias a Dios, recientemente pude tomarle las fotos a la Selección de Honduras.

Después de tomarle fotos a la ciudad de Toronto, tuviste la oportunidad de fotografiar al artista colombiano Maluma. ¿Cuéntanos acerca de esa experiencia, porque en aquel entonces eran como los inicios de él y también los inicios tuyos?

Eso nunca se me va a olvidar. Fue la primera vez que un amigo mío, Ricky Taco, lo trajo a él a un concierto aquí y era la primera vez que lo estaba conociendo. No era muy famoso, la verdad. Era bien jovencito, chamaquito. Me pidieron el favor que si podía tomar fotos en el concierto. Y yo dije que sí, pero sin saber cómo usar la cámara.

Te lo digo, ellos mismos me enseñaron cómo apretar el botón que quería. Pero la pasé genial. En ese día me divertí tanto que dije: ´yo quiero tomar fotos a todos los conciertos de todas partea del mundo, no me importa, los conciertos, esa es mi pasión´.

¿Con cuáles artistas, además de Maluma, has tenido la oportunidad de trabajar y de tomarles fotos? Si pudieras mencionar los más reconocidos o los que las personas en Honduras pudieran de repente identificar.

Te puedo decir que cuando se trata de conciertos, gracias a Dios, cuando llegan a Toronto, casi todos los artistas que vienen aquí, yo les tomo las fotos. Que la gente de Honduras me reconozca por eso. Entre ellos están: Daddy Yankee, J. Balvin, Eladio Carrión, Wisin, Romeo Santos, entre otros que pudiera mencionar.

Imagino que para ti es satisfactorio. Porque un chico que de repente compró una cámara, salió a la calle, empezó a tomarle fotos a grafitis, personas, ríos, y otros elementos dentro de la ciudad de Toronto, el tener la oportunidad de estar enfrente de estas grandes figuras mundiales y tomar fotografías de esos eventos es grandioso.

Muy bendecido, porque cuando comencé, yo no sabía lo difícil que era esta industria. Más que todo lo hacía para demostrar mi arte y porque yo sabía que sentía que podía ser un buen fotógrafo. Pasaba muchas horas en YouTube, practicando con mis amigos. Iba al Downtown de Toronto, a los conciertos gratis, a tomar fotos y a practicar con las luces.

Ahora, muy humildemente, todas esas aventuras que tomé con mi cámara me ayudó mucho. Ahora puedo ir a tomar fotos a los conciertos y sentirme muy confiable de que voy a estar bien, que voy a sacar las mejores fotos. Muchas de las veces me llena tanto de orgullo cuando los artistas suben mis fotos y ponen mi nombre.

Lo que más me gusta es que siempre hay muchos hondureños que me siguen a mí y dicen: ´wow, wow, un fotógrafo hondureño´, ´no sabía que había hondureños que hacían eso´. Sin embargo, llevo muchos años en esto y hay centroamericanos que trabajan en videos musicales, fotografía y estamos representando a nuestros países ahora.

Tomaste una fotografía que te cambió la vida, al rapero Nipsey Hussle, que es una persona que representaba una gran parte de la cultura del rap en este país. Una persona muy respetada, muy talentosa, muy amada, muy admirada. Fue asesinada y con la muerte de él, una foto que tú le tomaste se ha convertido en la foto más famosa que existe en todo el mundo de ese artista.

Esa foto se hizo muy viral. Lastimosamente, cuando él falleció, esa fotografía agarró vida y muchos artistas, actores y otras personas la han usado para tatuarse, han hecho camisas. Incluso los amigos de él, sus mejores amigos, han hecho como los diamantes con la fotografía. Es muy reconocida, muchos fanáticos de él (Nipsey Hussle) me han destacado.

El día que tomé la fotografía tuve suerte, es como que el destino me puso ahí para que le tomara. Ese día, él andaba sin camisa, entonces mostró todos los tatuajes, andaba todas las cadenas y se había hecho un ´Braid Up´ con las trenzas y andaba la bandana. Esa foto se la tomé en Miami, en el 2017, por Spiff TV.

Sabía que esa foto era especial, pero yo nunca me imaginé que iba a llegar a tanto, ¿me entiendes? Se puede decir que Nipsey es considerado como el Tupac de esta generación. Muchos fanáticos, y él, estaban muy conectados con la gente de Honduras. Cuando falleció, él estaba haciendo un documental sobre el Dr. Save.

¿Qué tanto has podido capitalizar económicamente con esa foto? ¿Te has logrado beneficiar o de repente solo te ha quedado la satisfacción de ´yo tomé esa fotografía´?

Al principio no quería hacer nada con la foto por respeto a él y su familia, pero un día no sé por qué me metí a internet a ver camisas de Nipsey. Había mucha gente usando mi foto, haciendo póster y vendiéndolas. Entonces dije: ´yo me tengo que poner las pilas´. Pude hablar con la familia y amigos de él. Le expliqué mis intenciones y me dijeron que estaba bien.

Desde ese entonces, he podido vender fotos de él e hice camisas, he hecho galerías con la foto. Mucha gente me ha comprado. Incluso artistas como Arcángel y amigos de Nipsey. Uno de los jugadores de la Selección de Canadá la tiene en su casa una camisa con la fotografía. La verdad es que es una bendición.

Increíble como una fotografía te puede cambiar tanto la vida porque profesionalmente te puso en un nivel muy alto y ahora muchísima gente aquí, en los Estados Unidos y en Canadá, conoció de tu trabajo y no solo en el mundo hispano, también en el mundo anglosajón.

No mucha gente sabe que el que tomó esa foto es hondureño. Y mucha gente aquí en Toronto no sabe que un ciudadano de Toronto tomó esa foto. Todo el mundo, incluso los amigos de él, pensaron que yo era de Los Ángeles y que yo había tomado esa foto en Los Ángeles. Cuando les dije que yo era de Canadá, no lo creían.

Después de lo de Nipsey, volviste a estar en escena y se habló mucho de ti por unas fotos que le tomaste a uno de los artistas de reggaetón más pegados del momento. Le tomaste fotos a Anuel AA el día que lo metieron preso.

De loco, me fui a meter a Puerto Rico. Y gracias a Dios me salió un amigo mío, que ahora es como un hermano para mí, Pepe Quintana, que es un productor allá de Puerto Rico. Él me dijo: ´brother, te voy a presentar a un artista que se llama Emanuel. Te lo voy a presentar y le vas a tomar fotos. Ese artista es el próximo que va a ser famoso aquí´.

Y yo dije: ´ok, vamos´. Cuando conozco a Emanuel, me dice ´¿qué quieres hacer?´ Yo le dije: ´llévame al caserío, vamos a tomar las fotos allá, hagamos una película´. Pero mira, yo no sabía en donde me estaba metiendo, la verdad, Yo sentí como que me fui a meter a la Rivera Hernández o a La Planeta.

Dije: ´Dios mío, porque donde me metí ni los policías entran ahí”. Entonces Anuel AA, me tranquilizó y me dijo: ´tú tranquilo, enfócate en mí, tómame las fotos, pero nada te va a pasar. Ya te imaginas, no me pasó nada en Honduras, pero me va a pasar en Puerto Rico. Gracias a Dios, esas fotos que le tomé ese día, fue una semana antes de que lo metieran preso. Entonces, todas esas fotografías, él las había subido a su Instagram.

Cuando lo enviaron a prisión, esas fotos eran las únicas fotos que estaban ahí, recientes. Entonces, todo mundo las empezó a usar. Siento que él en Puerto Rico ya era famoso, pero cuando fue a la cárcel, él se hizo mundial y mi foto también rodó por el mundo. Usaban la foto que tomé y también la colocaban en los artículos de él los Premios Billboard las utilizó. Yo me quedé: ´Dios mío, cómo que me han pasado cosas en esta industria que ni me la creo´.

Ahora que Anuel AA es una persona tan reconocida, uno de los principales exponentes del género, ¿todavía tienes la oportunidad de trabajar con él, de tener esa relación profesional con su gente o su entorno?

Cuando él salió de la cárcel, y mira cómo es la vida, hay cosas que se te dan y hay cosas que no, eso fue cuando andaba de novio de Karol G, Pepe Quintana estaba ahí y me dijo: ´¿vente para Nueva York? Él tiene dos conciertos en The Bronx y quiero que le tomes las fotos. Ahí van a conectar, él se acuerda de vos y me preguntó por vos. Ok, viaja a Nueva York´.

¿Crees que pude llegar al concierto? Yo no sabía que cuando ahí cae nieve, es como el fin del mundo. Ni Pepe Quintana ni yo pudimos llegar al concierto y la oportunidad nunca se dio. Pero Spiff TV, que es como un mentor para mí, está conectado con él (Anuel AA), entonces, no cabe duda que pronto se puede dar.

Otra cosa que es muy interesante contigo es que tenías el deseo de ser fotógrafo deportivo y también esa puerta se te ha abierto. ¿Para quién estás trabajando y dónde te ves en el futuro?

Cuando era más chico, con mi primo éramos grandes aficionados de una página que se llamaba Soccer Bible de Inglaterra. Cuando comencé a sentir que ya podía y tenía las capacidades de tomar fotos a ese nivel, yo me comuniqué con ellos. Les dije: ´yo quiero trabajar para ustedes aquí en Toronto´.

En ese tiempo, el equipo de Toronto FC era el campeón de la MLS, entonces, a ellos, me imagino, que les convenía tener a alguien aquí tomando fotografías. Y fue así como me dieron la oportunidad. Y lo que a ellos les gustó de mí es que tomo las fotografías de una forma distinta, con un toque urbano, en blanco y negro, que se vea como que pareciese un video musical; ese es mi estilo.

Desde ahí empecé en todos los partidos locales de Toronto. También, tomo fotografías cuando juega la Selección de Canadá. Y gracias a ellos, en la pasada eliminatoria, cuando Honduras vino acá, me tocó, tuve la oportunidad de fotografiar a jugadores de la Selección. La pasé genial. Mi meta es llegar al próximo mundial, que va a ser aquí en Canadá, Estados Unidos y México. Primero Dios, esa es una de mis metas, estar ahí, tomando fotografías.

¿Qué tanto te ilusiona la posibilidad de tomar fotografías para este medio, que con toda seguridad va a lograr ser acreditado para los partidos del campeonato mundial?

Que Dios te escuche, porque esa es una de mis metas. Sería perfecto que llegue a la Selección de Honduras al mundial y poder tomar esas fotografías, con eso me basta. Yo creo que ahí me puedo retirar como fotógrafo.

Con todo lo que te ha pasado, el éxito que has tenido con tus fotografías, ¿qué otras cosas te gustaría hacer, además de tomar fotos? ¿Cuáles son tus planes? ¿Qué te ves haciendo en el futuro además de esto?

Me gustaría ser dueño de mi propio estudio, abrir un lugar donde pueda enseñar a otros fotógrafos que quieran aprender. También darles un lugar a los jóvenes, donde ellos puedan ser creativos, yo veo eso. Otra de mis metas es sacar mi libro con todas mis mejores fotos.

En Toronto ya he hecho un par de galerías de mi trabajo y gracias a Dios la gente siempre me apoya, siempre vienen. Me gustaría llevar, tal vez un día, hacer una galería en San Pedro Sula, en ciudades de Estados Unidos como Miami, Nueva York, también en Europa. Pero si la hago en Honduras, sería feliz.

Algún mensaje que te gustaría compartir con las personas que van a ver esta entrevista y que tendrán en ti un ejemplo de que cuando se trabaja con dedicación, con honradez y empeño en lograr un objetivo, se puede.

Ya me siento viejo, tengo 37 años. Pero ¿qué les diría a los jóvenes? Que busquen algo que les apasiona y que luchen, luchen y luchen. Cuando comencé con esto, mucha gente me apoyó y sentía que esta era mi pasión y que podía llegar lejos, es más, yo siento que no he llegado donde yo quiero llegar, me hace falta mucho.

Todos los días estoy aprendiendo. No me acomodo, yo sigo adelante. No todos los días serán buenos. Hay ocasiones en las que pasamos por días muy oscuros, pero hay que seguir. A veces digo: ´si yo me hubiera rendido hace como cuatro años, no hubiera visto todas estas metas que ya alcancé.

Vivimos en una generación que hoy en día, incluso las personas juegan videojuegos están ganando mucha plata (dinero). Ahora los actores son nuevas celebridades. Busquen algo que les apasione y que nunca sientan que van a trabajar un día en su vida. Y si la gente no los apoya al principio, eso debería servir como motivación para seguir. Gracias a Dios, tengo mucha gente que me apoya, pero no fue así cuando comencé. Llevo casi nueve años en esto y no fue fácil.