Los aludes desatados por las lluvias han dejado hasta ahora 41 víctimas mortales en el suroeste de China y un número indeterminado de desaparecidos, informaron las autoridades locales citadas por la agencia oficial de noticias Xinhua.
El alud más letal se produjo el martes en la localidad de Xiaohe, en la jurisdicción de Zhaotong, de la provincia suroccidental china de Yunnan, donde más de 1,200 personas han sido afectadas por las inundaciones y avalanchas de barro y rocas desencadenadas por las potentes lluvias.
Según informó ayer el Ministerio de Asuntos Civiles, desde el 1 de julio, las lluvias e inundaciones han dejado 118 muertos y 47 desaparecidos.
Afectados
Además, 32.2 millones de personas en diez provincias del sur del país y en la municipalidad de Chongqing han sido afectadas por estos desastres meteorológicos.
El agua ha arrasado 101,000 viviendas, por lo que 1.1 millones de personas han tenido que ser reubicadas desde comienzos de mes, según la misma fuente.
Las pérdidas económicas directas se cifran en 3,300 millones de dólares.
Fenómeno
Las inundaciones son habituales en China en los meses estivales, sobre todo en su mitad sur, y este año están produciendo más problemas que en periodos pasados, ya que sólo en junio causaron 392 muertos y 510 desaparecidos, según cifras del Ministerio de Asuntos Civiles, el doble de la media registrada en el último lustro.
El fin de semana, unos 10,000 residentes fueron evacuados y trasladados a refugios, mientras que soldados transportaban sacos de arena, piedras y tierra y utilizaban topadoras para excavar el canal de emergencia.
