Con pancartas y la obstrucción de vías, los vecinos de La Tigra salieron de nuevo a las calles, inconformes, según dijeron, por las promesas incumplidas de las autoridades de la Alcaldía Municipal.
Cansados de esperar por casi dos meses una convocatoria de cabildo abierto que no llega para evitar la ejecución del polémico proyecto habitacional Condado Santa María y proteger el agua de La Tigra, las comunidades levantaron la bandera de lucha mediante las protestas.
Desde las 6:00 am bajo la neblina y temperatura fresca, uno de los tres grupos de vecinos tuvo un plantón en la calle principal de El Hatillo, a unos metros de la posta policial.
Los vecinos gritaban “La Tigra no se vende, se cuida y se defiende” y “Asfura, mentiroso, sos un tramposo”.
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A la vez, varias personas comenzaron a obstruir el paso en la carretera hacia Santa Lucía, a inmediaciones de la aldea El Chimbo.
“Quedó evidenciado que el alcalde Nasry Asfura se comprometió el 17 de septiembre a celebrar cabildos abiertos en un término mayor de dos meses, lo cual no fue cierto, los tiempos ya expiraron”, expresó Jaime Vásquez, integrante de la Comisión Pro Defensa de La Tigra.
Las protestas se dieron en tres puntos de la capital.
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Además, abolir el decreto que otorga el manejo de La Tigra a la fundación Amitigra y la cancelación del permiso de construcción y la licencia ambiental del cuestionado proyecto.
Las protestas fueron pacíficas, a excepción de la de El Chimbo, en la que los manifestantes fueron desalojados con gas lacrimógeno y una tanqueta policial.
Las autoridades policiales desalojaron ayer a los manifestantes que se tomaron una de las vías.
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