21/12/2025
06:00 AM

Se pierde la lengua garífuna entre jóvenes

“Buiti bináfi, mama”. Ésta era la forma de saludar de un menor a su madre o abuela hace unos 20 años en cualquier aldea garífuna del norte del país.

    “Buiti bináfi, mama”. Ésta era la forma de saludar de un menor a su madre o abuela hace unos 20 años en cualquier aldea garífuna del norte del país.

    Hoy en día esa costumbre que formaba parte de la educación de los niños poco a poco ha desaparecido de los hogares.

    La nueva generación viste, se comporta y se cree menos garífuna y más norteamericana, fenómeno social palpado en los distintos pueblos, en los cuales la lengua materna día a día se escucha menos en boca de la población.

    “El bombardeo exagerado de invasión de culturas en los medios radiales y televisivos ha tenido sus resultados en la juventud”, dijo el cantautor internacional Aurelio Martínez, quien ha llevado en alto el nombre de Honduras en cada una de sus presentaciones.

    “Veo cuatro aspectos fundamentales en esto, y lo primero es que estamos invadidos por otras culturas; segundo, la nueva generación de padres no les hablan garífuna a sus hijos. Tercero, los pastores prohíben reuniones alrededor del la cultura; y finalmente, la comunidad mestiza cada día toma más espacio en las aldeas”, indicó.

    Hablar de estos temas incómoda debido a que dentro de la misma comunidad habrá muchas personas a las que no les gusta el señalamiento. Muchos coinciden en que la batalla por conservar los valores culturales y la identidad propia está difícil de ganar.

    Los padres

    Muchos más coinciden en que la pérdida de la identidad obedece a varios aspectos. Uno de los principales es que en la mayoría de los hogares, los padres no les enseñan a sus hijos a hablar la lengua materna.

    Incluso se observan jóvenes optar por cambios radicales que van desde alisarse el cabello, tanto en mujeres como hombres, hasta en algunos penosos casos de escuchar de boca de algunos que han dicho: “no me hables en ese cangrejo”, en franca alusión a la lengua garífuna.

    “Mafeidirunubéi sun le hichugubei nagúburigu nun. No perderé lo que me dieron mis mayores”, dijo la joven Mariela Cacho, quien tiene la firme convicción de que aún hay tiempo de recuperar espacios perdidos.

    El ministro de Cultura, Arte o Deportes, Bernard Martínez, dijo que en este Gobierno se están creando estrategias en comunidades para el rescate de los valores culturales, mediante el estimulo de eventos.

    En la Odeco, año con año se desarrollan amplias jornadas de enseñanza de la lengua garífuna y en Internet, es frecuente ver lecciones de inglés y garífuna para quienes están en Estados Unidos.

    El escritor Salvador Suazo en su obra literaria “Conversemos en garífuna” escribió que “aquel que pierda su lengua será esclavo de lengua ajena”.