Fernando Lugo está dispuesto a romper con varias tradiciones en Paraguay. El sacerdote, de 56 años, obtuvo una histórica victoria en las elecciones presidenciales, con la que puso fin al régimen unipartidista de seis décadas del Partido Colorado.
Aunque fue suspendido 'at divinis' por el Vaticano cuando en 2006 decidió renunciar a su condición de obispo para lanzarse a la política, es el primero con ese cargo en llegar a la presidencia de un país.
Un día después de su resonante triunfo, sorprendió con dos anuncios: su hermana oficiará de 'primera dama' y manifestó que tras asumir el 15 de agosto le gustaría seguir viviendo en su modesta casa de Lambaré, suburbio de clase media baja de Asunción, y no en la residencia presidencial 'Mburuvicha Róga' (Casa del Jefe).
'Ella es una mujer desgastada por el trabajo intenso; crió a sus hijos dignamente; hoy ya es abuela, pero siempre fue mi consejera porque soy el menor de seis hermanos', dijo el lunes Lugo al referirse a su hermana Mercedes, de 66 años.
Aunque dio pocas precisiones sobre los futuros miembros de su gabinete, confirmó a la designada para el puesto, motivo de especulaciones durante toda la campaña electoral ya que si bien renunció al obispado, aclaró que ello no significaba abandonar el sacerdocio.
Lugo será el primer gobernante paraguayo soltero desde 1928 cuando el liberal Eligio Ayala llegó a la jefatura de Estado sin estar casado.
Actualmente en Sudamérica hay un caso similar: el presidente de Bolivia, Evo Morales, también designó a su hermana como primera dama debido a que es soltero.
En Chile, la presidenta Michelle Bachelet está divorciada y el cargo de 'primer caballero' está acéfalo.
Lugo dijo que su hermana 'está un poco enferma, pero es de mi confianza. Creo que podrá colaborar mucho conmigo', explicó a periodistas en el pequeño jardín de su residencia.
La mujer, casada y madre de un hijo, vive en Encarnación, a 450 kilómetros al sur de Asunción, donde el futuro presidente pasó la mayor parte de su infancia.
Tras confirmarse la victoria de su hermano, Mercedes destacó el valor del logro para los Lugo porque 'nuestra familia fue perseguida por más de 30 años sin que nadie pudiera tener oportunidad de un trabajo digno'.
Hijo de Guillermo Lugo y Maximina Méndez Fleitas, hermana de un reconocido caudillo político que enfrentó a los 'colorados', el mandatario electo nació en 1951 en San Solano. Se ordenó sacerdote en 1977, pero ya desde pequeño tenía vocación religiosa.
Tras su viaje como misionero a Ecuador, donde tomó contacto con la Teología de la Liberación, regresó a Paraguay en 1982 y en 1994 fue designado Obispo de San Pedro, la región más pobre del país.
Lugo también se refirió a dónde residirá tras asumir la presidencia.
'Me gustaría seguir acá (en Lambaré), con los vecinos', apuntó sobre su modesta vivienda pintada de blanco, rodeada por una muralla alta debido a la ola de inseguridad, con permanentes asaltos callejeros y atracos domiciliarios, uno de los males que deberá combatir durante su gestión.
La actual residencia oficial se destinará a eventos especiales.
Su casa era una procesión constante, pero no de fieles sino de amigos, partidarios y periodistas ansiosos por tener su palabra desde muy temprano, acorde a un país que por costumbre se pone en funcionamiento a las 6 de la mañana y todo se calma pasado el mediodía.
Seguido de cerca por cuatro guardaespaldas (suboficiales de la Policía Nacional), atendía sentado en un sillón o en el pequeño jardín a la entrada de su casa, donde se instalaron los diferentes canales de televisión esperando el turno para entrevistarlo.
Canoso, barba recortada, con anteojos y vestido con camisa blanca sin corbata, pantalones negros y sandalias de color marrón, no aparenta la imagen de presidente electo sino la de un sacerdote dispuesto a aconsejar a sus fieles.
Nota del día
Con la victoria del izquierdista se pone fin a seis décadas de gobierno del Partido Colorado
Ex obispo Fernando Lugo, nuevo presidente de Paraguay
El ex obispo y candidato izquierdista Fernando Lugo, de 61 años, quién colgó los hábitos en la Navidad de 2006 para ser candidato, lo cual le valió ser suspendido 'a divinis' por el Vaticano, se convirtió la noche de ayer en el sexto presidente de los paraguayos poniendo fin a los 61 años en el poder del Partido Colorado, incluyendo los 35 de dictadura de Alfredo Stroessner de 1954 a 1989.
'Hoy se sueña con un país diferente, que Paraguay no sea simplemente recordado por su corrupción y su pobreza, sino por su honestidad', dijo Lugo, en la primera rueda de prensa tras la difusión de las primeras proyecciones oficiales que lo dan como ganador en los comicios de ayer.
'Y para que nunca más se haga política en base al clientelismo y al prebendarismo, que tanto daño hacen', agregó el candidato izquierdista, que al llegar a la conferencia fue presentado por su secretario personal Rubén Penallo como 'el virtual presidente paraguayo'.
'Este 20 de abril marca una fecha histórica en el país. Hace unos meses nadie soñaba que un grupo de soñadores políticos pudiéramos juntarnos y poner al país en primer lugar', afirmó. Lugo obtuvo el 40.1% de los votos contra 31.4% de la oficialista Blanca Ovelar, según proyecciones oficial de la Corte Electoral con el 75% de la mesas escrutadas.
Otro izquierdista
Con la victoria de Lugo, la totalidad de países que integran en forma plena o asociada el Mercado Común del Sur, Mercosur, pasaría a tener gobierno de izquierda: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, más los países asociados, Chile y Bolivia, así como Venezuela, en proceso de ingreso.
Con victoria del ex obispo Lugo se pone fin a 61 años consecutivos de gobiernos del Partido Colorado, incluyendo los 35 de dictadura de Alfredo Stroessner de 1954 a 1989 en el poder.
Alegría
Explosiones de fuegos artificiales y bocinas de autos se sienten en Asunción desde que fueran publicadas las primeras encuestas a boca de urna. Los festejos se hicieron mucho más intensos luego de publicada la proyección oficial.
Casi tres millones de paraguayos concurrieron a los centros de votación que abrieron a las siete de la mañana y cerraron a las cuatro de la tarde como estaba programado.
Los paraguayos acudieron desde tempranas horas a ejercer el sufragio en los centros de votación.
El ex obispo, que llegó caminando desde su casa acompañado por Hebe de Bonafini, presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo de Argentina, emitió su voto y presentó a la prensa su dedo índice manchado con tinta endeleble, prueba de haber votado a las 7.11 de la mañana, siendo el primero de los candidato en llegar a votar.
Irregularidades
La organización de Transparencia Internacional denunció haber comprobado compra de votos, reparto de dinero en locales de votación, y la presencia de representantes del Partido Colorado en 'situación intimidatoria'.
'Se comprobó la compra de cédulas y reparto de dinero en los mismos locales de votación', denunció Pilar Callizo, observadora de Transparencia Internacional, en el canal 4 local. 'Además, hay comandos del Partido Colorado dentro y enfrente de los locales creando una situación intimidatoria', agregó. El nuevo presidente de Paraguay asumirá el poder el 15 de agosto.
Observadores avalan proceso
El ex presidente colombiano Andrés Pastrana, que encabeza la misión de observación internacional Ifes a las elecciones paraguayas, afirmó ayer que hubo 'una gran fiesta democrática', y que los gobernantes 'deben salir a demostrar que no son menos que la ciudadanía'.
'Hubo una gran fiesta democrática, la participación va a alcanzar el 65%, y ojalá que llegue al 70%', dijo Pastrana, jefe de la misión de la Fundación Internacional para Sistemas Electorales, Ifes. 'Los paraguayos salieron a votar', agregó.
'Ahora los gobernantes deben salir a demostrar que no son menos que la ciudadanía', declaró. Las elecciones paraguayas se desarrollaron 'perfectamente' y casi sin incidentes ayer, dijo Rafael Dendía, presidente de la Corte Electoral, agregando no saber a partir de qué hora podrán informar resultados.
'Hasta ahora hay error cero, todo está perfectamente en las mesas de votación, lo cual sumado al buen tiempo presagia una excelente votación', afirmó.
Números
5 años
De gobierno es el estipulado por las leyes de Paraguay para gobernar el país.
42 por ciento
De los paraguayos viven en la pobreza y un 13% se suman a la tasa de desempleo.