Tegucigalpa, Honduras.
La Alianza de Oposición pidió el pasado viernes 8 de diciembre, anular las elecciones del 26 de noviembre al alegar que 'hubo fraude'.
El partido, que postuló a la presidencia a Salvador Nasralla, afirmó ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) que hubo “alteración por dolo de las actas del escrutinio” para asegurar la reelección del presidente Juan Orlando Hernández.
“Ellos (los magistrados del TSE) saben que este proceso es totalmente fallido, es un proceso donde hay un robo por todos lados”, aseguró Nasralla tras presentar el recurso junto con el abogado y gerente de campaña de la Alianza, Marlon Ochoa.
“Comparezco ante este tribunal para interponer acción de nulidad de la votación y los resultados del escrutinio en las 18,103 mesas electorales receptoras” de los votos, anota el documento presentado por Ochoa.
La ley contempla que se puede solicitar la nulidad de la votación, el escrutinio, conteo y registro de votos, 'y estamos acomodando la solicitud a la ley”, dijo.
“Estamos agotando el recurso interno para ir a instancias internacionales” señaló, al insistir que si se hace un conteo general de todos los votos “saldrá ganando Nasralla, porque no hay crimen perfecto”, en referencia al supuesto fraude que alega la Alianza de Oposición.
En las cifras del TSE, con la totalidad de los votos contados, Hernández aparece con 42.98% de los votos y Nasralla 41.38%.
Nasralla acusa a Matamoros
Esa mismoa noche del viernes, al filo de las 11:00 pm, Nasralla presentó una denuncia penal en la fiscalía contra el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), David Matamoros, por el supuesto fraude registrado en los comicios.
En el escrito, se acusa a Matamoros de cometer 'dos delitos de falsificación de documentos públicos, abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario', cargos que conllevan largas penas de prisión en caso de ser hallado culpable.
Nasralla argumentó que la madrugada del lunes 27 de noviembre, el primer corte de la elección difundida por el TSE le daba una ventaja de cinco puntos, con 57% de las mesas computadas, algo que consideró 'una tendencia irreversible'.
Matamoros rechaza las acusaciones de la Alianza y dijo que para asegurar la transparencia del proceso inició el jueves un recuento de los votos de 4.753 urnas que fueron cuestionadas por contener inconsistencias.
El polémico revés
El primer informe del TSE dio una ventaja de cinco puntos a Nasralla con el 57% de los votos, pero luego se dio vuelta el resultado, poniendo al presidente Hernández a la cabeza con 1.6 puntos de diferencia.
La postergación del anuncio de los resultados finales avivó las denuncias de fraude.
La oposición y el PN han sacado a las calles a sus partidarios para reivindicar el triunfo, en manifestaciones que en algunos casos han desatado enfrentamientos violentos con las autoridades.
Recuento con observadores
El TSE, bajo observación de la misión de la OEA, de la Unión Europea y organizaciones civiles, empezó a recontar el jueves los votos que ingresaron al sistema durante las interrupciones, y espera que el proceso culmine este lunes.
Ochoa sostuvo que ese recuento del TSE no es aceptado por la Alianza, que no tiene representantes en el proceso.
El magistrado suplente del TSE, Marco Ramiro Lobo, quien tras el primer informe valoró que el triunfo de Nasralla era “irreversible”, dijo que el recuento estaba incompleto.
Indicó que lo ideal hubiese sido contar los votos, revisar el cuadernillo donde aparecen las firmas de los votantes para ver si coincide el número de votos con el número de firmas de los electores, pero eso no se está haciendo.
El Partido Liberal, la tercera fuerza de los comicios con 14.73% de los votos, presentó de su lado un recurso de nulidad por “violación de la Constitución y la ley electoral”.
El abogado Octavio Pineda dijo que Hernández es un “candidato ilegal” porque la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema le permitió la reelección, prohibida en la Carta Magna.
 Simpatizantes de la Alianza salieron con antorchas hasta la Embajada de EUA en Tegucigalpa.
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Protesta
Manifestantes de la Alianza de Oposición hicieron una fogata frente a la sede de la embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa la noche del viernes 9 de diciembre, para protestar por los resultados de las elecciones alegando estar “indignados contra el robo”.
La marcha recorrió un kilómetro por un bulevar hasta la misión diplomática gritando “Fuera JOH”, por las iniciales del presidente, llevando banderas y carteles a favor de su candidato a la presidencia, Salvador Nasralla.
Nasralla presentó el mismo viernes una denuncia penal en la fiscalía contra el presidente del TSE, David Matamoros, por el supuesto fraude registrado en los comicios.
