En un vuelo comercial que arribó alrededor de las 8:40 de la mañana de este viernes al aeropuerto Ramón Villeda Morales, de San Pedro Sula, llegaron los cuerpos de los migrantes hondureños que murieron en el interior de un tráiler en San Antonio, Texas (EEUU).
Se trata de los connacionales Alejandro Miguel Caballero (23), Fernando José Caballero (18), Margie Tamara Paz Grajeda (24), Adela Betulia Ramírez Quezada (28), Yazmín Nayarith Bueso Núñez (37) y Belkis Esmeralda Anariba (33), quienes fallecieron asfixiados cuando pretendían llegar a Estados Unidos.
Desde tempranas horas se ha dado movimiento en la zona de carga del aeropuerto sampedrano, familiares esperaban los restos de sus parientes en medio de un ambiente de dolor. La Cancillería de Honduras hizo las gestiones para el traslado de los restos que llegaron en un avión comercial, ya que el avión presidencial está en reparaciones.
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La repatriación tuvo un costo de 28,200 dólares, que fueron absorbidos en su mayoría por el gobierno, aunque hubo solidaridad de parte de los empresarios Yusuf Amdani y Mateo Yibrín que dieron 7,700 dólares.
“Son seis, no es un número como cifra, ni estadística. Son seres humanos, seis compatriotas nuestros que perdieron la vida al permanecer encerrados en el interior de un tráiler, en San Antonio, Texas, y hoy sus restos son regresados para que las familias les brinden cristiana sepultura”, indicó un comunicado brindado por Cancillería de Honduras.
Los cadáveres serán trasladados a diferentes departamentos del país, de donde eran originarios los ahora fallecidos. Para el caso, los hermanos Caballero serán sepultados en Las Vegas, Santa Bárbara, mientras que Margie Paz, quien era novia de Alejandro Miguel Caballero, aun familiares no confirman si será sepultada en Santa Cruz de Yojoa.
Asimismo, los restos mortales de Adela Ramírez serán llevados hasta Cuyamel (Omoa), mientras que el cuerpo de Yazmín Bueso será trasladado hasta El Progreso (Yoro). Finalmente, Belkis Anariba, la última hondureña que fue identificada tras la tragedia de Texas, será sepultada en el municipio de Victoria (Yoro).
FAMILIARES PIDEN PRIVACIDAD
En un comunicado, los familiares de Margie Paz, Alejandro y Fernando Caballero pidieron “privacidad” a los medios de comunicación para trasladar, velar y sepultar a sus seres queridos que murieron cuando buscaban el ansiado sueño americano.
“Más allá del impacto mediático de hechos tan dolorosos que han afectado a más de 50 familias, en México, Guatemala y nuestra Honduras, les recordamos que el dolor de la perdida es privado, aunque compartido por innumerables buenas personas a lo largo de nuestros países”, indican en el escrito.
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Y agregaron: “Deseamos mantener esa privacidad por sobre todas las cosas para poder hacer en paz lo que queda por hacer para nuestros muchachos. Por tanto, solicitamos respetuosamente a ustedes, miembros de la prensa, que se abstengan de intentar obtener declaraciones nuestras mientras recibimos, trasladamos, velamos y realizamos las honras fúnebres de nuestros jóvenes”.
