05/12/2025
11:25 PM

Quitan lujosos bienes a supuesto socio del capo Wilter Blanco

Estos activos están relacionados con un presunto socio del narcotraficante Wilter Blanco, así como con su núcleo familiar y terceros

San Pedro Sula, Honduras.

Una sentencia declaratoria de comiso que afecta a 144 bienes, entre los que se incluyen 48 muebles e inmuebles, tres sociedades mercantiles, 42 productos financieros, 48 vehículos, tres embarcaciones y un lote de semovientes se dictó en las últimas horas.

Estos activos están relacionados con un presunto socio del narcotraficante Wilter Blanco, así como con su núcleo familiar y terceros.

La acción de privación definitiva de dominio fue promovida por el Ministerio Público en relación a los bienes pertenecientes a los titulares de derecho Javier Antonio Cerrato Oliva, Blanca Francisca Canelas Munguía, Zonia Anabel Padilla Cruz, Ferretería Javier y Centro de Cerámicas de Interiores Javier.

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Según la investigación, estos individuos mantenían vínculos con Wilter Neptalí Blanco, quien fue extraditado y condenado por narcotráfico en los Estados Unidos, así como con la corporación Blanco y Melgar, que también era de su propiedad.

Los activos y negocios objeto de esta medida se encuentran ubicados en los departamentos de Colón, Yoro, Atlántida y Francisco Morazán.

De acuerdo con las investigaciones realizadas por la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), gran parte de estos bienes fueron adquiridos en un período de apenas tres años dentro de un período de investigación de 16 años.

Este caso se inició en 2006 y se estima que el monto injustificado de capital del clan Cerrato ascendió a casi 1500 millones de lempiras (L 1,497,128,728.73).

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A lo largo de los años, el Ministerio Público recibió múltiples reportes de operaciones o transacciones inusuales por parte de la Unidad de Información Financiera (UIF) de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS).

Las investigaciones realizadas por la FESCCO y la DLCN documentaron un crecimiento económico desproporcionado por parte de Javier Antonio Cerrato Oliva, quien comenzó su negocio, la Ferretería Javier en Tocoa, con un capital de apenas 35 mil lempiras (L 35,000.00). Sin embargo, con el tiempo, logró manejar cantidades millonarias que no eran congruentes con la actividad comercial que desarrollaba.