La falta de planeación para empezar a aplicar la Ley Especial para el Control de Tabaco es evidente, seis meses después de haber sido oficializada esa legislación en La Gaceta son más las preguntas que las respuestas.
La llegada del día en que la ley entró en vigor poco o nada afectó los hábitos de los fumadores sampedranos.
Reporteros de diario LA PRENSA hicieron un recorrido por la ciudad y pudieron comprobar que los fumadores consumieron cigarros sin ningún problema.
Se encontró a personas fumando en el hospital Mario Rivas, en la Gran Central de Metropolitana, en el parque central, otras plazas públicas y locales privados sin recibir sanción de ningún tipo.
No saben qué hacer
Según la ley antitabaco, la Municipalidad se encargará de imponer multas a los establecimientos que incumplan la regulación y la Policía Municipal tiene como obligación vigilar que los fumadores cumplan la ley.
El subdirector de la Policía Municipal, Pompilio Machado, fue franco sobre el conocimiento que se tiene de la ley.
“Creo que debieron capacitarnos antes de este día, ahora que ya se debe aplicar este reglamento no sabemos cómo, seguimos esperando que alguien nos comunique qué hacer”, expresó Machado.
El capitán Julio Gonzales, director de ese mismo organismo policial, también confirmó que no hay órdenes, ni instrucciones sobre la cuestión.
En la primera estación de la Policía Preventiva, los agentes aseguraron que no han recibido denuncias por el incumplimiento a ese instrumento legal y expresaron desconocer el procedimiento para aplicar sanciones o multas.
Plan de arbitrios
El alcalde sampedrano, Juan Carlos Zúniga, explicó que ya se comenzará a capacitar a policías municipales para hacer que se cumpla esta regulación.
Además informó que la ley ya fue incluida en el Plan de Arbitrios 2011, en el cual se especifica que la Municipalidad en conjunto con autoridades de Salud y Educación ejecutarán las acciones. Los vendedores ambulantes del parque central se quejaron de la ley antitabaco y de la ignorancia de las autoridades para implementarla. “Un policía municipal me amenazó con que me quitaría los paquetes de cigarros que ando vendiendo, se nota que andan inventando”, declaró Martha Broonfield, vendedora ambulante. Domingo Calderón, propietario de una pulpería, confirmó que él ya puso en práctica las medidas regulatorias para consumo del tabaco.
“No vendo cigarros por unidad, no permito que la gente fume aquí y pido identidad a quienes me parecen menores de edad”, afirmó Calderón.
Paradójico
Paradójicamente quienes demostraron estar preparadas y tomaron acciones el día en que se puso en vigor la ley fueron las tabacaleras.
Prueba de ello es que esas empresas hicieron llegar a los negocios que venden cigarros una circular en la que se exponen las prohibiciones y regulaciones de la ley.
En la capital la desobedecieron
Tegucigalpa. La Ley especial para el Control de Tabaco fue recibida ayer con enorme agrado por unos, pero con la oposición y la desobediencia de otros.
Jóvenes fumando en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH, venta de cigarrillos al menudeo y uno que otro ciudadano ignorando la prohibición en espacios públicos fue parte de lo que se pudo observar ayer en la capital. Pese a que la comercialización de cigarrillos al menudeo está prohibida por el artículo 17 de la Ley para el Control del Tabaco, ayer se pudo observar este mismo tipo de ventas en la calle en sitios conocidos como chicleras, quizá con menos abundancia que como había venido ocurriendo.
En las chicleras donde mayoritariamente se pudo observar la desobediencia a la ley fue en las que están en las diferentes estaciones del transporte público. En la máxima casa de estudios fue fácil encontrar jóvenes fumando a pesar de que la UNAH fue declarada por sus autoridades como “espacio libre del cigarrillo” antes de que la ley entrara en vigor.
