El empresario sampedrano Ernesto Lázarus ha sido testigo de los cambios que ha vivido San Pedro Sula.
Su fuerte es la construcción, pero se desempeña en cargos directivos de instituciones como la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), lo que le permite valorar los retos que tiene la ciudad y analizar los avances.
Con 60 años de edad, asegura que el principal reto en la actualidad ya no es la infraestructura, sino el saneamiento básico.
Se está renovando como una ciudad futurista. Antes fue modelo en Centroamérica como la de mayor crecimiento y a pesar de que hemos tenido una secuela de malas administraciones, vemos que con esta nueva gestión municipal la ciudad se está renovando.
Las finanzas municipales están mejorando y eso ha permitido que la Municipalidad pueda trabajar en obras de infraestructura, vialidad y en una serie de inversiones de carácter social. Se está trabajando con el plan maestro de San Pedro Sula que proyecta a la ciudad no a 25, sino a 100 años, y viene a recordarnos que San Pedro se perfila para ser nuevamente la ciudad modelo de Centroamérica.
Estamos sentados en el valle más esplendoroso de Honduras, donde tenemos esa gran facilidad de poder crecer. No tenemos ninguna topografía accidentada, hay ríos y se tienen en planes proyectos como El Tablón, que puede traer mucho beneficio para esta ciudad. Se podría comenzar a hablar de riego industrializado y agroparques, lo que generará empleo y la posibilidad de inversión de empresas grandes que darán otra cara a la ciudad.
Hay desarrollo en el noreste, también en el sureste, que será impulsado por el proyecto del libramiento de San Pedro Sula. Hay un crecimiento nunca antes visto porque con la tecnología en la construcción y las alianzas público privadas (APP) se mira un desarrollo exponencial de la ciudad.
Hay que incorporar la tecnología. El alcalde ha sido ambicioso y ha tenido una mente futurista al entender que las ciudades para proyectarse hacia el mundo deben adoptar nuevas tecnologías, entre ellas la comunicación digital, ya que facilita el acceso. Hoy, hay formas de saber cómo se puede transitar por la ciudad sin mayor tráfico y estamos viendo modernización en la vialidad, pero falta todavía que los sistemas de peaje sean más eficientes. Hay modernización en las oficinas de control de ingresos y los trámites son electrónicos. Todo eso es un atractivo para la inversión.
Claro que sí. Habían algunos esfuerzos de los últimos dos años que se ven concretados en 2017. Coinciden los proyectos de Siglo 21 y con el mejoramiento en las áreas de control de ingresos se han logrado financiar muchos proyectos municipales como los túneles. El desarrollo que estaba en planos ahora se convierte en un desarrollo real porque ya está en ejecución.
Es una herramienta importante para una ciudad como San Pedro Sula. Se realizó una licitación y se adjudicó a un consorcio muy serio y estas compañías traen su experiencia internacional, pero también la local como Saybe y Asociados.
El problema en la ciudad ya no es ni siquiera la seguridad ni la infraestructura, ahora el tema más importante es el saneamiento de San Pedro Sula. La inversión para poder tratar esas aguas residuales supera, según las estimaciones, los 5,000 millones de lempiras y se tiene que invertir en esto, pero el problema es de donde saldrán los recursos.
Actualmente hay un problema entre la concesionaria y la Municipalidad y no se ha logrado llegar a un acuerdo, pero este impasse se tiene que resolver. Ese problema de saneamiento afecta y aleja la inversión. Podemos hacerlo todo, no obstante, si no hacemos el saneamiento de San Pedro Sula tenemos un grave problema que hay que enfrentar.
Extraño que no podemos caminar por las calles. Siento que estamos trabajando fuerte en el tema de seguridad, la Municipalidad ha trabajado en la iluminación de varios barrios con el programa “San Pedro Sula Brilla”. Eso traerá más confianza a los sampedranos para que las personas vuelvan al tiempo de convivencia. Vemos que se han unido esfuerzos entre el Gobierno, Municipalidad y empresa privada para recuperar espacios.
Trabajar más para que los pequeños empresarios se puedan convertir en emprendedores de los barrios y colonias y puedan generar empleo para la gente que hoy por hoy no tiene una oportunidad de trabajo.
Claro que sí, pero bien diseñadas, donde exista un compromiso tanto del que propone como del que está en la parte pública. Deben obligar al inversionista, a través del contrato, para dejar obras que dejen calidad de vida a los sampedranos.
Seguir concentrado en el ordenamiento de la ciudad y en fortalecer las finanzas, porque eso ya se emprendió. Venimos de más de 20 años de desorden financiero y en tres años se ha logrado ordenar.
Debe buscar atraer la inversión para que el sector mipyme pueda crear oportunidad de empleo para mucha gente que no tiene las competencias técnicas para poder ostentar a un puesto laboral donde realmente se necesita. Hay que apoyar el emprendimiento local.