Después de un año y siete meses del brutal crimen de José Ernesto Torres Oviedo, de 25 años, en Valencia, España, sus presuntos homicidas se enfrentarán a la justicia.
El próximo 10 de septiembre empieza el juicio oral en los tribunales españoles. La sala 19 de la audiencia provincial del jurado de Valencia será el escenario donde se determinará la inocencia o culpabilidad de Emanuel Martínez Alemán, de 39 años, y Sonia Leticia Medina Rodríguez, de 37, ambos hondureños, supuestos autores del asesinato de Torres en enero de 2009, cuyo cuerpo fue encontrado desmembrado dentro de una maleta, en un terreno baldío de la calle Mistral, en Valencia, España.
En la audiencia que, se espera, durará seis días se agotarán las pruebas testificales y documentales que sustentarán el fallo que el juez asignado al caso dé en este “crimen de la maleta de Benimaclet”, como llamaron los medios a este asesinato en España.
La familia de la víctima busca apoyo de organizaciones, instituciones y el Gobierno para obtener los recursos y asistir a la citación que, en calidad de testigos, les ha girado el juzgado que conoce el caso. La cita está prevista para el 13 de septiembre a las diez de la mañana.
Los implicados
Emanuel Martínez Alemán y Sonia Leticia Medina, los presuntos autores de la muerte de José Ernesto Torres Oviedo, fueron detenidos 48 horas después del hecho, cuando la hija de Sonia y novia del fallecido reportó a las autoridades la desaparición de su novio.
La pareja fue arrestada por la Policía de España por su presunta implicación en la muerte del hondureño, que apareció desnudo, acuchillado y torturado dentro de una maleta.
La pareja, según los medios españoles, le había pedido a Carol Iriarte que no denunciara el hecho, argumentando que el joven se había ido por un problema de dinero.
Estas explicaciones resultaron muy sospechosas para los investigadores, que se llevaron a Carol, a su madre y al novio a la Jefatura Superior de Policía, donde todos fueron interrogados. Días después, Carol salió libre y regresó a Honduras debido a que estaba embarazada y hace un año dio a luz a la hija de la víctima.
Ahora pretende regresar a España para clamar por justicia y garantizar que la muerte de su marido y padre de su hija no quede impune.
“Estamos pidiendo a Dios fortaleza y ayuda para lograr que la muerte de mi hijo no quede impune. Han sido días de angustia y estamos a un paso de que la justicia de Dios y del hombre lleguen”, le dijo a LA PRENSA doña Judith Oviedo, madre de José Ernesto Torres Oviedo.
Doña Judith aún no se recupera de la trágica muerte de su hijo, de quien conserva únicamente fotografías, y a su nietecita, que vino al mundo sin conocer a su padre. “Mi hijo no merecía una muerte como la que tuvo.
Haremos todo lo que esté a nuestro alcance, pero estamos desorientados porque no sabemos si el Gobierno de España nos asignará un abogado para que nos oriente en el proceso o qué ocurrirá”, agregó la señora.
Explicó que desde España únicamente la llamaron a ella y a su nuera para confirmarles que el juicio comienza el próximo 10 de septiembre, pero que no le dieron mayores detalles. “Con la muerte de mi hijo se fueron todos sus sueños. Esperamos que la justicia española dé a los hechores el castigo merecido” manifestó entre sollozos doña Judith Oviedo.
Madre y esposa, citadas a declarar en España
Judith Oviedo Villalta, madre del hondureño asesinado, ha sido citada para declarar en el caso como testigo del hecho. Ella y Carol Iriarte Medina, 23, quien fuera la pareja de la víctima, deberán presentarse a la instancia judicial y rendir su declaración sobre lo ocurrido. Si no lo hacen, corren el riesgo de que el caso quede sin el soporte necesario para demostrar la culpabilidad de los dos detenidos en el caso.
Las declaraciones de las dos hondureñas son fundamentales, especialmente Carol, con quien el infortunado hondureño compartió los últimos días de su vida.
La madre y el padrastro de Carol son los principales sospechosos del brutal crimen de José Ernesto Torres, ocurrido en Valencia, España, en enero de 2009.
El extraño triángulo sentimental entre los implicados se supone que motivó la tragedia, ya que Carol, quien denunció la desaparición de su pareja, había mantenido una relación con el novio de su madre y la madre con la pareja de su hija.
Por ahora se espera que la madre y pareja de la víctima logren reunir los recursos y asistir al juicio, que empezará el 10 de septiembre en los tribunales de Valencia, España.