Las estadísticas son claras: 2007 fue el año de los quemados.
Los hospitales públicos reportaron durante el año anterior un aumento considerable en el número de pacientes ingresados por quemaduras. El Hospital Escuela es uno de los casos más evidentes.
La unidad de quemados de este centro hospitalario reportó durante 2006 alrededor de 226 niños quemados por diferentes causas, entre ellas fuego, líquidos calientes y pólvora. Esta última causa ha dejado 10 niños quemados sólo en la temporada de fin de año. Este elevado número de pacientes revela un incremento del 40 por ciento en relación con 2006, ya que en ese período ingresaron alrededor de 180 pacientes.
Omar Mejía, jefe de la unidad de quemados del Materno, comenta que 'lo que ha sucedido este año con los quemados nos ha dejado alarmados. Esto sólo indica el descuido por parte de los padres de familia y la poca voluntad de las autoridades de ponerle fin a este tipo de situaciones'.