Unos 30 hondureños estarían entre los 72 migrantes asesinados en México la semana pasada, de acuerdo al testimonio de uno de los dos sobrevivientes, informó este viernes el vicecanciller hondureño, Alden Rivera.
El viceministro, que encabezó en México la repatriación de los restos de 16 víctimas, aseguró que 'el sobreviviente nuestro (hondureño) nos indica que son unos 30 hondureños los que murieron en esa masacre'.
Rivera manifestó esta mañana a HRN que tiene las huellas dactilares de los 56 cuerpos y harán las comparaciones Medicina Forense con los archivos del Registro Nacional de las Personas para comprobar si hay más hondureños.
Unas 56 huellas dactilares de las 72 personas que fueron masacradas el 24 de agosto pasado, serán enviadas mañana a Honduras, se informó este viernes en la Cancillería hondureña.
Las fichas serán enviadas por la Procuraduría General de México a la Secretaría de Relaciones Exteriores, cuyos funcionarios las remitirán al Ministerio Público para que se realice el debido proceso en la Dirección de Medicina Forense.
El vicecanciller de Honduras, Alden Rivera mencionó que con esta información se podrá hacer una comparación de los cuerpos que fueron traídos al país el miércoles pasado y confirmar la información que se tiene y obtener más elementos de identificación.
También pidió a los familiares de las personas que salieron ilegalmente en el período comprendido del 20 de julio y el 12 de agosto, para que se presenten a la Morgue del Ministerio Público o los puedan llamar a los teléfonos 235-3192 y 2353195.
A estas personas se les va a llenar una ficha con la información necesaria para tener otros elementos de comparación para salir de la duda en el proceso de identificación.
Las autoridades hondureñas repatriaron el miércoles 16 cadáveres, pero una vez que llegaron a Tegucigalpa los médicos forenses tuvieron dudas sobre la identidad de cuatro cuerpos, que podrían ser incluso de personas de otro país.
Hasta ahora han sido identificados casi la mitad de los 72 indocumentados que fueron masacrados a tiros el 22 de agosto en una hacienda del estado mexicano de Tamaulipas por una banda criminal.
Un ecuatoriano y un hondureño sobrevivieron a la matanza. Entre las víctimas hay también 12 salvadoreños, cuatro guatemaltecos y un brasileño, ya identificados.
