Desde este jueves, todos los vehículos que entran a San Pedro Sula son rociados con un bactericida, esto como medida de contención para evitar la propagación del coronavirus COVID-19.
Desde el martes 17 de marzo, San Pedro Sula se encuentra bajo un toque de queda absoluto, asimismo la ciudad cerró todas sus entradas y salidas. Solo los carros que transportan mercancías y personas que por sus trabajos tienen que salir de la ciudad tienen permitida la libre circulación en las calles.
Con trajes de bioseguridad, guantes y mascarillas, los empleados municipales rociaron el líquido a todos los vehículos.
La fumigación de los vehículos se realizó en las tres entradas de la ciudad: bulevar del sur, bulevar del este y salida a Puerto Cortés.
En San Pedro Sula se han confirmado dos casos de coronavirus, un hombre asiático de 66 años y una mujer que tuvo contacto con él.
A nivel nacional, son 12 casos de COVID-19 que han confirmado las autoridades sanitarias de Honduras, mientras que 90 personas son vigiladas por sospechas de contagio.
A nivel mundial, más de 240,000 personas se han contagiado con el nuevo coronavirus, de las cuales 9,842 han fallecido a causas de la enfermedad. En tanto, unos 84,962 se han recuperado.