REDACCIÓN. La migraña es un padecimiento que afecta tanto a niños como a adultos, sin embargo, las mujeres entre los 20 y 45 años son tres veces más propensas a padecerlas.
¿Por qué? Una de las posibles causas investigadas es la genética; al día de hoy, se conoce que la mayor parte de quienes experimentan una migraña tiene antecedentes familiares.
Asimismo, este tipo de trastorno primario de dolor de cabeza se relaciona con los cambios hormonales de las mujeres; es decir, puede darse alrededor del momento de la menstruación o durante el embarazo.
También, aquellas que planifican con anticonceptivos orales y ya padecen de migrañas, pueden experimentar cambios en la frecuencia e intensidad de los ataques, mientras que quienes no suelen tener dolores de cabeza, son propensas a desarrollar migrañas.
CAUSAS
De acuerdo con el doctor Carlos Cano, líder médico de medicina interna de Pfizer Centroamérica y Caribe, las migrañas suceden por cambios anormales en los niveles de las sustancias que el cerebro genera naturalmente.
Cuando estos niveles se incrementan, los vasos sanguíneos se estrechan de forma temporal, disminuyendo el flujo de la sangre y el oxígeno al cerebro, y ejerciendo presión sobre los nervios cercanos, lo que causa el dolor.
“Por lo general, el dolor que experimentan quienes padecen migraña es intenso y punzante, ya sea en uno o ambos lados de la cabeza, e inclusive, cada mujer puede vivirlo de forma diferente. Por eso, resulta importante hacer del conocimiento de estas personas que existen tratamientos, tanto preventivos como para aliviar síntomas, así como prácticas en el estilo de vida, que pueden ayudarles a mejorar su día a día”, explica el doctor Cano.
SÍNTOMAS
Existen varios tipos de migraña; sin embargo, las más frecuentes son la migraña con aura, que se caracteriza porque la persona puede tener síntomas sensoriales -sensación de confusión, hormigueo en el rostro o manos, visión con luces que destellan o puntos oscuros y sentido del olfato, gusto o tacto distorsionados-, entre 10 y 30 minutos antes de iniciar el dolor.2 El otro tipo es la migraña común, que no tiene aura.2
En ambos casos, el dolor de cabeza intenso, las náuseas y los vómitos suelen hacerse presente, e inclusive aparecen en las mañanas.2y3 Dicho dolor puede durar algunas horas o días.
También, ciertas personas pueden tener migrañas semanalmente (una o dos veces) y otras, de forma más esporádica (una o dos veces al año).2 Lo cierto, es que los ataques de migraña afectan el diario vivir de la mujer, más que otras enfermedades crónicas con o sin dolor.2,3y4
Según estudios, el mayor pico de migrañas sucede entre la segunda y cuarta década de las personas, coincidiendo con las edades de mayor productividad, impactando su desempeño laboral, familiar y social (actividades recreativas) y más en quienes tienen una alta frecuencia de ataques de migraña. Se estima que las mujeres pierden hasta seis días por reposo debido a las migrañas.
De acuerdo con el doctor Cano, el impacto de las migrañas en las relaciones familiares también es importante. Algunas investigaciones han revelado que cuando la mujer o paciente sufre este padecimiento, se dan más discusiones intrafamiliares e inclusive brotan sentimientos de que pueden ser mejores madres o hijas, si no lo tuvieran.
“Una persona con migraña sabe lo debilitante que es esta enfermedad; sin embargo, su impacto general se ha visto subestimado como un problema de salud pública y social.
Es necesario que la población conozca lo que vive un paciente con migraña, incluyendo los temores a raíz de la anticipación de los ataques, para tener conciencia de los costos individuales de la enfermedad y generar acciones de apoyo”.
CONTROL
Los pacientes diagnosticados con migraña pueden poner en práctica algunos consejos de estilo de vida, como es el caso de comer saludable y no saltarse ninguna comida, a lo que se une evitar la ingesta de aquellos alimentos desencadenantes.
Asimismo, practicar actividad física regularmente y aprender tácticas para reducir el estrés; levantarse y acostarse a la misma hora, todos los días, y limitar el consumo de bebidas con cafeína, así como alcohólicas.
¿QUÉ HACER EN UN ATAQUE DE MIGRAÑA?
1. Si la migraña no está acompañada de náuseas, puede tomar mucha agua.
2. Procure descansar en la oscuridad y en un lugar silencioso.
3. Tome el medicamento contra la migraña (recetado por un médico) de forma inmediata.
4. Aplique presión leve o moderada en la zona de dolor.
5. Practique ejercicios de relajación y respiración.
6. Coma a diario frutas (como el aguacate, las bananas y los cítricos).
7. No se exceda con productos de repostería, chocolate y carnes procesadas.
Créditos: Pfizer