La salud mental es un factor clave en el desempeño laboral

La salud mental no es solo responsabilidad de las empresas, cada individuo debe priorizarla.

  • 12 oct 2022
Establecer límites con compañeros o jefes de trabajo y tomar descansos es básico para evitar el estrés laboral

REDACCIÓN. El National Institute of Mental Health (NIMH) define la salud mental como el bienestar emocional, psicológico y social, y que además afecta la forma en que pensamos, sentimos, actuamos, tomamos decisiones y nos relacionamos con los demás, explica Xenia Croasdaile , experta en psicología clínica y empresarial.

IMPORTANCIA

La salud mental no es menos importante que la salud física, ya que el ser humano es un ser holístico, es decir, hay una relación integral en los aspectos físicos, mentales, emocionales y sociales que lo con forman.

Por ende, para que cada persona pueda tener una salud general y una calidad de vida deben considerarse estos aspectos y darles la importancia que merecen.

A veces olvidamos que para estar bien tenemos que enfocarnos en nuestros aspectos mentales o emocionales y no solamente en los físicos.

El principal problema recae en que las preocupaciones mentales no muestran síntomas evidentes como los síntomas físicos y es por lo que en ocasiones a las personas se les dificulta buscar ayuda profesional.

Aunque existen muchas empresas aplicando estrategias enfocadas a la salud mental de sus trabajadores, este tema sigue siendo un tabú en muchas otras empresas y por ende no se aborda lo suficiente.

La salud mental es un factor clave en el desempeño laboral

DIFICULTADES

Los problemas de salud mental, como el estrés o la depresión, pueden afectar el desempeño laboral.

Lic. Xenia Croasdaile - psicóloga clínica y empresarial

“Los trabajadores deben entender que para tener un buen desempeño laboral deben sentirse biene e implementar algunas estrategias que beneficien su salud mental.”

La salud mental es un factor clave en el desempeño laboral

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), indican que estos factores pueden repercutir en los trabajadores en los siguientes aspectos.

Rendimiento y productividad, compromiso con el propio trabajo, comunicación con los compañeros, capacidad física, desempeño diario y falta de interés social.

DEBER DE LAS EMPRESAS

Crear una cultura de comprensión y apoyo hacia los trabajadores para que haya un mejor rendimiento y productividad.

Esto requiere talleres de mindfulness, trabajos híbridos, acceso a profesionales de la salud, formación a mandos intermedios para que fomenten el autocuidado.

Créditos: Xenia Croasdaile, psicóloga clínica y empresarial