Síndrome de la cabaña, conozca todo sobre esta patología y su relación con la COVID-19

Dejar la seguridad de la casa y salir a la calle representa un temor para muchos. Al hacerlo es importante que cumpla con las medidas de bioseguridad

  • 27 may 2020

Redacción.

A muchas personas les está costando bastante volver a salir a la calle después de la cuarentena: ¿y si me cruzo con alguien y me contagio? ¿y si toco aquí o allí? Y la respuesta, en ocasiones, será una catástrofe detrás de cada ¿y si…? Es importante que seamos realistas sobre el riesgo que corremos al salir a la calle, ni minimizarlo como si fuese imposible contagiarse ni magnificarlo como si irremediablemente nos fuéramos a contagiar.

Tras largas semanas recluidos en casa para estar a salvo del coronavirus, en muchos países del mundo está llegando el momento de empezar a recuperar la normalidad, la nueva normalidad. Sin embargo, algunas personas sienten ansiedad y miedo a abandonar la seguridad de sus casas, es lo que se conoce como el síndrome de la cabaña.

Tome nota
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No se trata de una patología como tal, sino de un estado anímico, mental y emocional que se ha estudiado en personas que, tras pasar un tiempo de reclusión forzosa, han experimentado dificultades para volver a su situación previa a l confinamiento.



María José Collado, doctora en psicología y codirectora del Centro Cuarto de Contadores, en Leganés (Madrid), afirma que es normal que nos pase factura la adaptación a una situación nueva en la que sentimos que nuestra vida y la de quienes nos importan está en riesgo.

“Con una adecuada higiene y manteniendo la distancia de seguridad con otras personas es muy poco probable que podamos contagiarnos. Por lo tanto, es fundamental ser prudentes, pero también realistas”, recalca.

En este sentido, la psicóloga afirma que, en realidad, tenemos bastante control sobre la amenaza, pues el riesgo de contagio depende, en gran medida, de nuestra higiene y de la protección que llevemos.

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Cómo afrontar el miedo.

La única manera de superarlo será poco a poco, es decir, con una desensibilización sistemática. Los psicólogos utilizamos esto en psicoterapia para lograr reducir la ansiedad y los miedos fóbicos del paciente, acercándolo poco a poco a ese temor”, comenta la experta.

“Entramos de manera repentina a esta nueva manera de vivir, y concebimos nuestra casa como el lugar seguro. Ahora continúa la incertidumbre y salir a la calle supone afrontar nuevas situaciones, lo cual puede ser difícil”, asegura la psicóloga Sandra Isella.

Isolation Quarantine Coronavirus Covid 19



Algunas recomendaciones

Mayor vulnerabilidad si se vive solo: el confinamiento forzoso es una situación difícil a nivel psicológico y si además se ha tenido que pasar en soledad, la sensación de aislamiento es mucho más profunda, favoreciendo que se padezca el síndrome de la cabaña.

Reconocer el miedo: Tener conciencia de esta emoción y aceptarla es el primer paso para poder enfrentarse a ello de la mejor manera posible.

No forzarse a salir: obligarse a salir solo porque esta permitido es un error que puede desencadenar en problemas psicológicos más serios.

Marcar ritmos para volver: empezar con pequeñas salidas e ir aumentando poco a poco el tiempo de las mismas hasta que uno se sienta seguro.

Asumir que siempre existirá riesgo: siempre va a existir un cierto grado de incertidumbre al enfrentarse a una situación como lo actual. Lo importante es nunca llegar a grados extremos de ansiedad, miedo o tristeza.

Premiarse: cada paso que se consiga al enfrentarse al miedo es un avance para la salud psicológica, darse un premio a uno mismo por estos logros es una buena motivación para seguir adelante.

Tome nota de estas recomendaciones

Más seguridad
Acatar las normas de sanidad recomendadas como el lavado de manos o el uso de mascarillas nos proporcionará seguridad y hará que nos resulte más fácil enfrentar el peligro.

Foto: La Prensa

Adaptación
Cada persona “se debe poner sus tiempos e ir dando sus propios pasos sin sentirse forzada, con seguridad. De igual modo, no debe forzar el cambio, pues este debe ser gradual.

Foto: La Prensa

Hábitos adquiridos
El trabajo, el ocio y las relaciones sociales no serán exactamente como antes y tendremos que incorporar a nuestro día a día algunos de los hábitos adquiridos en las últimas semanas.

Foto: La Prensa