“No le quería prestar el carro”: el plan fatal que dejó sin vida a Darío y Liz
La tragedia sacude a dos familias en Santa Bárbara. Policía investiga intoxicación por monóxido de carbono como causa de sus fallecimientos
- 14 de marzo de 2025 a las 19:27 -

El joven Darío Antonio Leiva Merino convenció a su padre de prestarle el carro sin imaginar que sería la decisión que acabaría con su vida. Una sucesión de eventos desafortunados dejó sin vida al joven de 18 años y a otra joven de 16 en el barrio El Calvario, Santa Bárbara, ayer por la noche.

Según lo relatado por el padre de Darío, el joven le pidió prestado su vehículo para salir de casa. En principio, el padre de familia no accedió, pero este terminó convenciéndolo al decirle que estuvo de cumpleaños hace dos días (el 12 de marzo). “Fue mi error más grande”, dijo mientras esperaba a que Medicina Forense entregara el cuerpo del joven este viernes en San Pedro Sula.

”Fue como a las 10:30 de la noche. Ya estábamos preocupados. Él no llegaba a esa hora. Nos fuimos a dar con la sorpresa que cuando fuimos al garage allí estaba él con la muchacha adentro del carro”, dijo el padre del joven. Añadió que el garage estaba en la casa de una tía suya.

“Cuando miré a mi hijo boca abajo, lo saqué del carro, empecé a darle boca a boca, a darle masajes en el pecho, pero él ya estaba rígido. Ya estaba muerto”, extendió el padre en entrevista con medios sampedranos.

Dijo no conocer a la muchacha y después supo que era vecina del barrio El Calvario, sitio donde ocurrió la tragedia. Parientes de la joven Liz Marién Varela, la otra fallecida, dijeron que la joven pidió permiso para salir de su casa argumentando que se reuniría con compañeros para preparar una exposición escolar.

”Salieron a buscarla, pero sólo se encontraron con la tragedia”, extendió un tío de la joven en entrevista con medios.

La muerte de Liz ha causado profunda consternación entre sus parientes y amigos en Santa Bárbara. Es recordada en mensajes que han colgado en redes sociales como una joven carismática y alegre.

Por otro lado, el padre de Darío Antonio dijo sobre él: “Era un hijo callado. A él no le gustaba hablar sobre sus cosas. Era muy reservado. Ya había sacado 12 clases. Estudiaba Gerencia de Negocios”. “En el momento en el que uno se descuida, es cuando pasan las cosas”, lamentó el padre de Leiva Merino.

La Policía dijo que continúa recopilando información relacionada con el hecho y no descartan que se trate de una muerte por intoxicación causada por monóxido de carbono.

Los cuerpos entraron a las 3:00 a.m. a morgue SPS. Serán velados y enterrados en Santa Bárbara.