Gonzalo, de combatir en Afganistán, a matar por la espalda a niño de 11 años en Houston
Julián había tocado el timbre de la casa de Gonzalo León, quien le disparó por la espalda. Ante el clamor de ayuda del menor, se fue caminando y no lo auxilió
- 04 de septiembre de 2025 a las 18:00 -
Gonzalo León, de 42 años, es un veterano del Ejército de Estados Unidos que estuvo desplegado en Afganistán entre 2014 y 2015, según reveló a CNN un portavoz militar. En los años posteriores sirvió en la Guardia Nacional de Texas.
Este exmilitar mató por la espalda al pequeño Julián Guzmán, quien había hecho una travesura.
Gonzalo ya fue detenido y este miércoles, vestido con el uniforme naranja, escuchó a la jueza imponer su fianza en $1 millón “debido a la investigación en curso y a la posible intensificación de los cargos”.
Julián Guzmán bromeaba junto a uno de sus primos a tocar a las puertas y salir corriendo cuando el sospechoso, Gonzalo León, lo disparó de muerte por la espalda.
El fiscal, de hecho, reveló que podrían presentarse más cargos, incluido el de homicidio capital —el más grave, por circunstancias agravantes, que pueden llevar a la cadena perpetua o pena de muerte —, dada la corta edad de la víctima.
Al registrar la vivienda de Gonzalo, se encontraron más de 20 armas como pistolas, rifles tipo AR-15 y granadas de humo.
Tras el tiroteo, la policía llegó la noche del sábado 30 de agosto al lugar de los hechos y utilizó el sistema de sonido de un vehículo a alto volumen para persuadirlo de que saliera de la vivienda por su propia voluntad, lo cual ocurrió 20 minutos después.
León fue detenido entonces, pero liberado a la mañana siguiente, el domingo. No fue hasta el lunes cuando los investigadores decidieron acusarlo formalmente de asesinato.
La policía lo localizó más tarde en un hotel que había reservado por tres días, donde se encontraba junto a su familia. Su abogado explicó que se trasladó allí porque su vivienda estaba rodeada por medios de comunicación desde el fin de semana.
Las autoridades que investigan el caso informaron que dos niños tocaron tres veces la puerta del sospechoso en un lapso de unos 15 minutos la noche del sábado.
De acuerdo con la investigación, no fue un hecho fortuito: León los esperaba escondido en su propiedad —donde también estaban su esposa y su hija de dos años— cuando los menores regresaron por tercera vez.
“El hombre estaba esperando entre las sombras, en su propio patio lateral, detrás de una cerca de su jardín”, declaró a CBS News Michael Cass, sargento de la Policía de Houston.
Posteriormente, un primo de la víctima declaró a la policía que “vio a un hombre vestido de negro salir por la puerta de madera” junto a la vivienda.