Comer frutas es una de las costumbres más sanas que puedes adquirir para conservar una buena alimentación y una dieta rica. Todas las frutas tienen peculiares propiedades que son características de cada una, por ejemplo, estos meses el mango está por todas partes. Es el momento de aprovechar todo lo que esta fruta te puede ofrecer.
El mango es el fruto de un árbol (Mangifera indica) que llegó desde Asia a Brasil en el siglo XVIII a través de los conquistadores portugueses. Hay miles de variedades de mango: de piel verdosa, rojiza o amarillenta; redondos, en forma de corazón o de fríjol; de pulpa muy suave o muy fibrosa. Cada forma, color o tamaño es un tipo de mango, el preferido de muchos es el confite por ser uno de los que tiene más dulce sabor.
Conviene comerlos en su punto (ni demasiado maduro ni muy verde). El tiempo ideal de consumirlos es cuando vemos que su olor es intenso y su piel está lisa y sin manchas negras.
Su contenido de fibra le confiere propiedades laxantes. La fibra previene o mejora el estreñimiento, además contribuye a reducir las tasas de colesterol en sangre, al buen control de la glucemia y tiene un efecto saciante, beneficioso en caso de diabetes y exceso de peso, eso sí, en cantidades adecuadas.
El mango también tiene propiedades antioxidantes gracias a su alto nivel de vitamina C. Ideales para tratar enfermedades degenerativas, como las de las personas fumadoras. El mango es una buena alternativa para aquellas personas que no toleran otras fuentes de vitamina C como las naranjas, pimientos, limones o kiwis.
En las dietas
El mango es una de las frutas tropicales que más abundan en nuestro país, los tipos varían según la cantidad de azúcar, por ejemplo, también cuenta su tamaño y color pero todos tienen en común una propiedad muy importante para todos nosotros y que hace que el cuerpo se mantenga saludable, esta es la vitamina C. Con ella se previene enfermedades como la gripe, enfermedades degenerativas, o los que padecen de colesterol. Pero también ayuda a bajar de peso, aunque muchos nutricionistas no lo recomiendan para este fin, el resultado dependerá de las cantidades en que los consumas.
Por ejemplo cuando te digan “puedes comer mango para adelgazar” no significa que comerás tres en un día o uno a diario, indica Marlon Avilez, médico general y especialista en medicina interna de Clínica Médica Biológica Los Andes. El especialista explica que muchas personas tienen esta confusión y por eso cuando incluyen el mango en su dieta tienen el resultado contrario.
Pero el detalle está en cuidar las cantidades que se ingieren, porque recordemos que esta fruta es rica en azúcar.
El mango se está utilizando sobre todo en dietas que se combina un carbohidrato y una proteína, por ejemplo un carbohidrato que contiene almidón y un carbohidrato simple que puede ser una fruta y carbohidrato que contiene fibra que puede ser vegetal, aconseja el médico, no sin antes advertir que toda dieta tiene que ser supervisada por un experto en la materia para mayor efectividad. El azúcar que tiene el mango no es simple, es fructosa, y esa azúcar tarda un poco más en convertirse en glucosa.
Por eso solo debes comer una rodaja de mango diaria y no uno entero. En el mango verde la fructosa no está lista para digerirse, es ácido y es hasta que madura se vuelve dulce, pero siempre contiene vitamina C, A y todas sus propiedades. Agregarle sal (sodio) no le quita las propiedades, son aditivos que no afectan, al igual que la pimienta y el chile picante.
¿Quiénes lo deben consumir?
Si consumirlo
• Este es conveniente en casos de colesterol, obesidad y estreñimiento.
• Beneficioso en caso de diabetes y exceso de peso, eso sí, en cantidades adecuadas.
• Ideales en casos de enfermedades degenerativas.
• El mango es bueno para los no tolerantes a otras fuentes de vitamina C como las naranjas, pimientos, limones o kiwis.
No consumirlo
• No sería adecuado en personas con tendencia a la diarrea.
• Los diabéticos sí pueden comer mango pero considerando la cantidad, porque en exceso los puede perjudicar.
Algunas clases de mango
ROJOS
Kent: De tamaño grande (500 a 800 g) y de color amarillo anaranjado con rojizo a la madurez, es de forma ovalada orbicular, de agradable sabor, jugoso de poca fibrosidad y de alto contenido de azúcares.
Haden: de tamaño medio a grande (380 a 700 g) y que a la madurez adquiere un color rojo-amarillo, con chapa rojiza, es de forma ovalada, de pulpa firme y de color y sabor agradables.
Tommy Atkins: De tamaño grande (600 g) y de forma oblonga, oval, resistente a daños mecánicos y con mayor período de conservación, pero no tiene las mejores características en cuanto a sabor y aroma. Es la variedad más común en los mercados y es tardía.
VERDES
Keitt: De forma ovalada y tamaño mediano a grande (600 g) con una pulpa de poca fibrosidad, jugosa y muy firme.
Amelie: Es originaria de África Occidental y tiene poco contenido de fibra.
Ataulfo: De tamaño mediano a pequeño, bajo en fibra y desarrollado en México.
Manila Super: De tamaño pequeño (10 onzas) y forma alargada y aplanada, de sabor fuerte, producida principalmente por Filipinas.
Nam Doc Mai: De origen tailandés, de excelente sabor, poco fibrosa y de semilla pequeña.