San Pedro Sula, Honduras.
1. Para deshacerte de los nervios y la ansiedad, respira profundo y afloja todos los músculos de tu cara. Un buen beso precisa de una tensión natural en los labios, ni muy firmes ni demasiado relajados.
2. Un beso digno de ser recordado jamás comienza de golpe ni con la boca abierta. El primer contacto debe ser un roce suave. Imagina que los labios de la persona deseada son como un exquisito trago que quieres empezar a beber de a sorbos.
3. El ritmo de tu respiración y la presión con la que tocas sus labios debe incrementarse poco a poco. No debes invadir a la persona que besas. Deja pequeños espacios entre beso y beso para percibir también su deseo de besarte.
4. Contrariamente a lo que todo el mundo cree, no sólo es posible respirar mientras se besa, sino que también es uno de los secretos de un buen beso francés. ¿Cómo hacerlo? Usando la nariz para inhalar y exhalar, sin necesidad de separar los labios. Esto te permitirá dar largos y apasionados besos.
5. Morder suavemente sus labios puede ser una idea excelente, pero debes hacerlo con cuidado. La presión con que lo hagas debe tener la medida exacta para ocasionarle una sensación placentera y no dolorosa.
6. Los labios son una zona de mucha sensibilidad. Aprovéchala. Mordisquea despacio primero en su labio superior y luego su labio inferior. También puedes acariciarlos de lado a lado suavemente con tu lengua.
7. Es muy importante que acompañes tu beso con una apropiada ubicación de tus manos. Si tomas sus mejillas con tus palmas le proporcionarás la sensación de que controlas el beso y estás cien por ciento focalizado/a en él. También puedes acariciar su cuello, sus orejas, sus hombros y su nuca, siempre con movimientos lentos.
8. Tomar de la mano a la persona que besas puede ser muy placentero e incluso encender más la pasión. Acaricia sus palmas, presiónalas al tiempo que juegas con su boca y déjale saber de este modo cuánto te gusta.
9. Recorrer su espalda con tus manos es una buena forma de incrementar el deseo. Puedes ir de arriba hacia abajo lentamente y jugar con la presión de tus caricias: éstas harán que su cuerpo se acerque mucho más a ti.
10. Si realmente buscas encender la pasión, los besos en el cuello son un arma casi infalible. Pero debes procurar estar en el tiempo y el espacio indicados para no incomodar a la persona besada. Roza suavemente tus labios a lo largo de su cuello. Puedes dar pequeños mordisqueos y caricias con tu lengua. Pero, ¡cuidado! La zona es muy sensible y no debes ejercer demasiada presión ni succionar, porque puedes dejarle marcas.
1. Para deshacerte de los nervios y la ansiedad, respira profundo y afloja todos los músculos de tu cara. Un buen beso precisa de una tensión natural en los labios, ni muy firmes ni demasiado relajados.
2. Un beso digno de ser recordado jamás comienza de golpe ni con la boca abierta. El primer contacto debe ser un roce suave. Imagina que los labios de la persona deseada son como un exquisito trago que quieres empezar a beber de a sorbos.
3. El ritmo de tu respiración y la presión con la que tocas sus labios debe incrementarse poco a poco. No debes invadir a la persona que besas. Deja pequeños espacios entre beso y beso para percibir también su deseo de besarte.
4. Contrariamente a lo que todo el mundo cree, no sólo es posible respirar mientras se besa, sino que también es uno de los secretos de un buen beso francés. ¿Cómo hacerlo? Usando la nariz para inhalar y exhalar, sin necesidad de separar los labios. Esto te permitirá dar largos y apasionados besos.
5. Morder suavemente sus labios puede ser una idea excelente, pero debes hacerlo con cuidado. La presión con que lo hagas debe tener la medida exacta para ocasionarle una sensación placentera y no dolorosa.
6. Los labios son una zona de mucha sensibilidad. Aprovéchala. Mordisquea despacio primero en su labio superior y luego su labio inferior. También puedes acariciarlos de lado a lado suavemente con tu lengua.
7. Es muy importante que acompañes tu beso con una apropiada ubicación de tus manos. Si tomas sus mejillas con tus palmas le proporcionarás la sensación de que controlas el beso y estás cien por ciento focalizado/a en él. También puedes acariciar su cuello, sus orejas, sus hombros y su nuca, siempre con movimientos lentos.
8. Tomar de la mano a la persona que besas puede ser muy placentero e incluso encender más la pasión. Acaricia sus palmas, presiónalas al tiempo que juegas con su boca y déjale saber de este modo cuánto te gusta.
9. Recorrer su espalda con tus manos es una buena forma de incrementar el deseo. Puedes ir de arriba hacia abajo lentamente y jugar con la presión de tus caricias: éstas harán que su cuerpo se acerque mucho más a ti.
10. Si realmente buscas encender la pasión, los besos en el cuello son un arma casi infalible. Pero debes procurar estar en el tiempo y el espacio indicados para no incomodar a la persona besada. Roza suavemente tus labios a lo largo de su cuello. Puedes dar pequeños mordisqueos y caricias con tu lengua. Pero, ¡cuidado! La zona es muy sensible y no debes ejercer demasiada presión ni succionar, porque puedes dejarle marcas.