Cuando Alfredo Jones inició sus estudios en tecnologías de la información, las computadoras ocupaban un cuarto entero.
Ahora, a sus 53 años, el empresario brasileño y actual CEO de Movitext, reflexiona sobre la evolución de la informática en América Latina, así como el potencial de las incubadoras de negocios o startups ante la creciente comunidad de emprendedores digitales que emerge en todo el país.
A pesar que un profesional hondureño tenga menos posibilidades de tener una experiencia con cierto tipo de problemas que enfrenta un centro de Europa, la tecnología es accesible, porque las personas pueden adquirir celulares o computadoras.
Cada vez más se aplica la programación de computadoras y tecnologías de la información a nuevos problemas. Hay un desarrollo de tecnología que se puede utilizar en pequeños lugares o hacer pequeñas aplicaciones y negocios en los que nunca se había utilizado y que antes representaban grandes problemas.
Hoy en día, hay una gran moda por algo llamado Internet de las Cosas (IoT) y eso es colocar tecnología para solucionar problemas cotidianos o a gran escala.
El problema de servicios informáticos o emprendedurismo informático tiene varios lados: uno de ellos son los financiadores de esas microempresas que hacen pequeñas inversiones en muchos proyectos con la esperanza que alguno de ellos produzca una ganancia.
La segunda es el problema técnico. La gente debe capacitarse más para resolver cualquier problema. Esa es una dificultad, porque se trata de aprender cosas que no son fáciles. La tercera situación es que la gente joven no tiene mucha experiencia de qué lo es interesante comercialmente.
El cuarto aspecto es saber si el plan es viable en términos económicos porque a veces para desarrollar un proyecto se requerirán tantas horas de desarrollo e inversión que pueden cerrar las cuentas. La gente se presenta a hacer cosas que no son fáciles.
En algún sentido, el mercado de trabajo hondureño no cuenta con las condiciones más favorables. Sin duda los startups están fomentando el emprendedurismo de los jóvenes. Muchas gente debe pensar que si tiene una idea, debe desarrollarla y eso es bueno, porque muchas veces el profesional que es bueno va a tener más oportunidades para desarrollarse de forma independiente haciendo un nuevo aplicativo móvil que haciendo mantenimiento de un sistema administrativo de una empresa. No tengo duda alguna que entre los jóvenes de hoy habrá un ambiente de emprendedurismo mucho mayor de lo que habría en Silicon Valley.