Los hombres, sospechosos de matar a los dos jóvenes durante una riña en el bar y discoteca “El Tamarindo” de Sabá, fueron capturados tras una persecución policial en el barrio La Pava.
Las investigaciones señalan que los jóvenes estudiantes fueron confundidos con miembros de la MS-13, lo que llevó a los integrantes de la pandilla 18 a planificar el asesinato.