Cada ciclo agrícola, los productores hondureños enfrentan plagas y enfermedades que ponen en riesgo su estabilidad económica y la seguridad alimentaria.
Surgió así, en poco tiempo, el “boom” del cultivo de la papa. Muchos se sumaron a esas tareas y vieron que las ganancias de sus esfuerzos eran muy buenas.
De acuerdo con el Banco Mundial, sin servicios de cuidado infantil, muchas mujeres, principalmente en el área rural, quedan excluidas de empleos formales y mejor remunerados.
Un segundo momento empezó bajo la administración Callejas y ha continuado con sus sucesores, expandiendo o apoyando más cultivos orientados a la exportación.