Los cardenales Pietro Parolin y Peter Erdo se perfilaban como favoritos iniciales, pero tras las primeras votaciones Prevost se convirtió en la sorpresa del cónclave.
El nombre que ha escogido, León XIV, es en sí un manifiesto. Evoca al papa León XIII, autor de la encíclica “Rerum Novarum”, encíclica fundacional de la doctrina social de la Iglesia.