“Me escondí bajo el escenario de la fiesta y me acosté junto a 3 personas muertas. Me unté con la sangre que goteaba de uno de los cuerpos a mi lado y fingí estar muerta durante 3 horas”, contó May Hayat.
La mentalidad de un pitbull es vencer, vencer hasta el final”, opinó Gustavo, mencionando que después de la esposa de su vecino lo hizo entrar a la casa, el perro comenzó a rasguñar la puerta, “como diciendo ‘aún no he terminado contigo’”.