El Programa Nacional de Reducción de Pérdidas ha encontrado 17,500 medidores “amañados” en la región cinco, el circuito 245 del sector sureste es el que más “roba”.
Hay asentamientos en las cercanías de basureros municipales, la contaminación es una bomba de tiempo y su vida gira en torno a extrema pobreza, incluso sin los servicios básicos.
La falta de inversión en transmisión, distribución y subestaciones, explica altas pérdidas técnicas y no técnicas. El 60% de circuitos pierden más del 30% de energía.