Al parecer, un miembro de la familia saltó al agua y comenzó a golpear al tiburón hasta que el animal soltó al menor, que tuvo que ser trasladado de urgencia en avión a un hospital.
Luego, “Baymax” fue tratada con calcio y oxitocina para estimular la puesta de huevos, que finalmente se produjo este martes con la expulsión de más de un centenar de huevos en un tanque de recuperación lleno de arena.
El pasado 16 de febrero una persona murió al ser atacado por un tiburón de grandes dimensiones que le causó “heridas catastróficas” en una playa de Sídney, en el sureste de Australia.