Este 30 de noviembre vamos a decidir la dirección de nuestro destino compartido, si será desde la izquierda progresista, desde centro derecha con enfoque liberal o la derecha conservadora.
Orientar la política exterior del país no es solamente asunto que va más allá de asumir posturas ideológicas; debe estar profundamente ligada al interés nacional.
Por muchos años escuché de voces añosas que ahora ya no están diversas historias de la Honduras de los años 30 a 60 del siglo pasado, cuando la intolerancia política reinaba en el país.