El año escolar comenzará dentro de poco, y un destacado grupo de pediatras advierte que muchos niños que comenzarán el kindergarten carecen de las habilidades que necesitan para tener éxito en la escuela.
Para ayudar a los padres a preparar a los niños para el inicio de la escuela, la Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics, AAP) acaba de publicar un informe sobre qué ayuda a fomentar el éxito, además de qué factores podrían entorpecer la experiencia escolar de los niños.
'Nos enfocamos en la adquisición de las habilidades preacadémicas, pero eso no es lo más importante', aseguró la autora del informe, la doctora P. Gail Williams, miembro del comité ejecutivo del Consejo de la Niñez Temprana de la AAP.
Lo importante, apuntó, es que los padres 'creen en los niños un amor por el aprendizaje, el disfrute de los libros, la alfabetización temprana, el juego adecuado, que aprendan a autorregularse y a interactuar con sus compañeros y con los adultos'. Los niños a quienes les encanta aprender y que son resilientes tienen más probabilidades de que les vaya bien en la escuela, tanto académica como socialmente.
Williams comentó que los padres deben comenzar a enseñar esas habilidades a los niños desde que nacen. 'En el desarrollo cerebral temprano, se crean conexiones neurales basadas en las experiencias tempranas y en las relaciones con los padres, los hermanos y los miembros de la comunidad', señaló.
Y no se preocupe, no está recomendando que entrene a sus hijos con tarjetas educativas. 'Haga cosas de las que disfrute con sus hijos. Juegue con sus hijos. Lea con sus hijos', sugirió.
Un ejemplo, dijo, es preparar la cena. 'Hable con sus hijos sobre lo que está haciendo, y déjelos ayudar cuando sea posible. Puede hablar sobre cuáles alimentos son saludables, o apuntar a los colores de los distintos alimentos. Conviértalo en una experiencia de aprendizaje', planteó Williams.
¿Qué impide que un niño tenga éxito en la escuela?
Tener menos recursos era un factor. Apenas un 48% de los niños pobres están listos para comenzar la escuela a los 5 años, frente a tres cuartas partes de los niños de familias con unos ingresos moderados o altos. Los niños que han experimentado eventos traumáticos (como abuso, negligencia, ser testigos de violencia en casa, o la pérdida de un padre debido a la muerte, el divorcio o el encarcelamiento) presentan casi tres veces más probabilidades de tener que repetir un curso, en comparación con sus pares que no han experimentado esos eventos.
Un obstáculo importante al preparar a los niños para la escuela es el trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH). Esos niños tenían 21 veces más probabilidades de tener problemas para estar listos para la escuela, en comparación con los niños sin el trastorno, encontró otro estudio reciente.
El estudio, dirigido por la doctora Hannah Perrin, de la Universidad de Stanford, incluyó a 100 niños de 4 o 5 años. Más o menos la mitad habían sido diagnosticados con TDAH o tenían síntomas significativos de TDAH, y la otra mitad no tenían síntomas de ese tipo.
Los investigadores anotaron que los niños con síntomas de TDAH presentaban diferencias llamativas, en comparación con los demás niños. Era mucho más probable que su método de aprendizaje estuviera perjudicado, tenían dificultades sociales y emocionales, un desarrollo del lenguaje afectado, y problemas con el bienestar físico y el desarrollo motor.
Los autores del estudio dijeron que proveer intervenciones y servicios a esos niños pequeños podría ayudar a reducir sus dificultades en la escuela.
Eric Herman, psicólogo clínico en el Hospital Pediátrico de Michigan, en Detroit, apuntó que las personas se muestran renuentes a diagnosticar el TDAH en los niños pequeños, pero aseguró que para los niños ser diagnosticados más bien pronto que tarde es una 'inmensa' ayuda. 'Algunos niños han tenido problemas durante dos o tres años, y debido a eso ya tienen un sentimiento negativo sobre la escuela', dijo.
Una vez ese ciclo comienza, romperlo puede resultar difícil. Herman apuntó que aunque nadie quiere que le diagnostiquen una enfermedad a su hijo, es importante comunicar cualquier preocupación que tenga sobre la conducta de su hijo al pediatra.
Aunque el informe sobre el nivel de preparación para la escuela no detalló los efectos potenciales que el tiempo frente a las pantallas (ya sea un teléfono, una tableta, una computadora o la televisión) podría tener en el nivel de preparación de un niño para la escuela, tanto Williams como Herman expresaron preocupación.
'Es importante asegurarse de que sus hijos estén socialmente preparados para la escuela', dijo Herman. '¿Pueden estar sentados y tranquilos y en general comportarse bien? Los teléfonos y otras pantallas pueden distraer mucho. Imagínese un restaurante. Quizá le dé a su hijo el teléfono para poder estar tranquilo, pero eso significa que no tiene la oportunidad de desarrollar el autocontrol. También hay una pérdida de socialización', añadió.
Williams recomendó limitar el tiempo ante las pantallas. 'Algunos padres usan el tiempo frente a las pantallas de forma efectiva como recompensa, pero eso se debería limitar. Los niños pequeños deben aprender las habilidades básicas de cómo se interactúa con las demás personas. La única forma de aprender la autorregulación y qué es una conducta adecuada es a través de la práctica y aprender de otras personas', explicó.
Tanto el informe sobre el nivel de preparación para la escuela como el estudio sobre la preparación para la escuela entre los niños en edad preescolar con TDAH se publicaron en la edición en línea del 22 de julio de la revista Pediatrics.
Más información
Para más información sobre cómo preparar a su hijo para el kindergarten, visite la Asociación Nacional de Educación Infantil (National Association for the Education of Young Children).
Muchos niños no están listos para el kindergarten
Aprendan a autorregularse y a interactuar con sus compañeros y con los adulto
- 14 ago 2019 /
Estados Unidos