El luto, el dolor y la impotencia invadieron a la ciudad de Siguatepeque, específicamente a la gran familia católica de la parroquia Nuestra Señora del Carmen de esta ciudad, por el vil asesinato de uno de sus feligreses.
Se trata de Jairo Cardona, a quien la mano criminal le arrebató la vida la noche del viernes junto a su hermano Jefry Cardona y tres jóvenes más.
El escenario del sangriento hecho fue el barrio Zaragoza, donde también perdieron la vida Melvin Saúl Gálvez, Walter Umaña y Wilmer Antonio Díaz.
Según la versión policial, minutos antes del asesinato, los jóvenes se encontraban departiendo en el sector cuando individuos armados se bajaron de un pick-up rojo sin placas y dispararon sin piedad.
En la escena del crimen se encontraron más de 30 casquillos de arma de fuego 9 milímetros y casquillos de fusil 5.56.
Líder de Iglesia Católica
Jairo Cardona hace varios años había iniciado un camino al servicio de Dios.
El joven líder de la iglesia era parte de una familia de siete hermanos quienes a corta edad quedaron a cargo de su padre luego del fallecimiento de su madre. Pese a sus escasos recursos económicos, el joven había cursado sus estudios secundarios.
Según el relato de los feligreses, Cardona había convivido por muchos años en la casa cural de la parroquia Nuestra Señora del Carmen.
Fue en ese lugar donde forjó desde que tenía 14 años sus principios cristianos, que lo llevaron a ser miembro de grupos juveniles y desarrollar algunas funciones como sacristán en el templo católico durante las misas.
Cardona había estado al cuidado y servicio del párroco de la iglesia, quien lo apoyó para concluir sus estudios secundarios. Luego recibió la mano amiga de uno de los feligreses de la iglesia, que lo adoptó como si fuese un hijo.
Su hermano Jefry Cardona, quien recién había regresado de Estados Unidos, había abandonado el país debido a la difícil situación económica de su familia en ese momento.
