Como si se tratara de vender frutas se exhibieron
ayer durante todo el día en las principales calles del centro de la ciudad los pertardos, morteros, metralletas, silvadores y volcanes, entre otros artefactos que por años han causado el dolor de niños y grandes que han sido víctimas de quemaduras por el inadecuado manejo de los explosivos.
Las autoridades municipales dicen desconocer cuáles son los puntos de venta e insisten
en que están ejecutando operativos constantes; pero lo cierto es que es más fácil conseguir en la calle los cohetes que buscar comida.
Los vendedores, sin ningún temor, sacaron desde tempranas horas los explosivos para exhibirlos en los cestos donde normalmente colocan las frutas. Los compradores tenían de donde escoger, pues la diversidad de los cohetes, así como su grado de peligrosidad, era mucha.
Descuido de las autoridades
German Jiménez, subcomandante del Cuerpo de Bomberos de San Pedro Sula, lamentó que las autoridades no estén haciendo nada para controlar la venta de estos peligrosos productos.
“Esta es una responsabilidad directa que tiene la Policía Municipal en cuanto al decomiso de los cohetes de alto riesgo. No se está haciendo nada para controlar esto, no se está cumpliendo ni la ordenanza ni la ley que regula la venta de este producto”, exclamó Jiménez.
El oficial de bomberos pidió a los padres de familia tener cuidado con los cohetes que les dan a sus hijos, pues ellos son los responsables directos de los infantes.
“Los padres de familia deben tener gran sentido de responsabilidad, no deben darles cohetes a los
niños porque muchas veces les explotan y luego terminan en el hospital con sus dedos mutilados sin necesidad”, señaló Jiménez.
Recordó que en sus años como bombero ha visto el dolor que las personas sufren por quemaduras de los productos de pólvora. “En una ocasión en el municipio de Villanueva se explotó una cohetera y fue triste ver a una muchacha tirada en el suelo partida en tres pedazos por la detonación. La vida humana tiene un gran valor y hay que respetarla”, puntualizó.
Geovany Paz, director del Juzgado Municipal, declaró que se está trabajando de forma permanente en los operativos y que se han hecho muchos decomisos. Agregó que los vendedores aprovecharon que ayer no trabajaban los inspectores y eran pocos los policías municipales, para vender el producto sin ningún control.