Las 10 claves del acuerdo de cese al fuego entre Israel, Líbano y Hezbollah

Fin inmediato de las hostilidades: A partir de las 4 a. m. del 27 de noviembre de 2024, Israel y Líbano acordaron un cese total de los enfrentamientos, incluyendo bombardeos y operaciones terrestres. La medida busca poner fin a un año de conflicto que dejó más de 3,700 muertos y deberá implementarse completamente en un plazo de 24 horas.

Compromiso de paz: Hezbollah y otros grupos armados se comprometen a cesar cualquier acción contra Israel, mientras este se abstendrá de realizar ataques en territorio libanés.

Seguimiento internacional: La ONU, mediante la Unifil, tendrá la tarea de vigilar el cumplimiento del acuerdo, con el respaldo de actores externos en la mediación.

Desmilitarización controlada: El gobierno libanés comenzará a desmantelar instalaciones ilegales de producción de armas, principalmente al sur del río Litani, y reforzará las medidas de control sobre el tráfico de armamento.

Retiro progresivo de tropas: Israel retirará sus fuerzas al sur de la Línea Azul en un proceso que tomará hasta 60 días, coordinado estrechamente con las autoridades libanesas.

Mecanismos de control: Un comité internacional, liderado por la ONU, se encargará de verificar y monitorear la implementación de cada uno de los puntos pactados.

Resolución de conflictos pendientes: Se facilitarán conversaciones indirectas entre Israel y Líbano para tratar disputas no resueltas en la Línea Azul.

Estabilidad a largo plazo: Se promoverán proyectos internacionales destinados a reconstruir la economía libanesa y a fomentar la paz en la región.

Defensa bajo normas internacionales: Ambas naciones mantienen su derecho a defenderse dentro del marco del derecho internacional, en caso de futuras amenazas.

Estados Unidos y Francia serán los mediadores y vigilantes que el acuerdo se mantenga.