15/05/2025
10:15 AM

Aquí y en Múnich



Graco Pérez

Del 14 al 16 de febrero de este año se desarrolló la Conferencia de Múnich. En este evento anual, los líderes de las potencias mundiales debaten los problemas de seguridad que más les preocupan.

Aparte de 35 presidentes y otra cantidad de ministros, también estuvieron personalidades como John Suffolk, jefe de seguridad cibernética de Huawei, y Mark Zuckerberg, uno de los creadores de Facebook.

El secretario de Estado, Mike Pompeo, sostuvo que el Partido Comunista chino “representa un enorme riesgo para Occidente”. Poco después, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, acusó a Estados Unidos de lanzar “mentiras y acusaciones que no están refrendadas por hechos” y de crear problemas de forma artificial.

El mes pasado, el Gobierno de Reino Unido decidió permitir la entrada de Huawei en su red 5G, aunque con restricciones. Mientras, Londres y Pekín mantienen conversaciones sobre la posible colaboración china en la construcción de la alta velocidad británica.

Según el presidente del Eurasia Group, Ian Bremmer, el presidente Donald Trump “con su unilateralismo está empujando a los europeos en la dirección de China”. El problema, añadió, es que Estados Unidos no es capaz de ofrecer una solución tecnológica alternativa.

El canciller ruso Sergei Lavrov prefirió usar su intervención para explicar la propuesta de Vladimir Putin de organizar una cumbre anual entre los cinco países miembros del Consejo de Seguridad.

Explicó que no se trata de “crear un club privado para decidir los destinos del mundo, sino de asumir nuestra responsabilidad como miembros permanentes del Consejo y preocuparnos por la estabilidad y la seguridad mundial”. La tecnología es un tema de seguridad aquí y en Múnich.