Para conmemorar el 11/11/11 y el carácter insólito, de buen augurio o mágico de esta cifra, miles de personas en todo el mundo decidieron casarse, jugar a la lotería o “ponerse al unísono con la energía mundial”.
Miles de parejas desde Shanghái hasta Jakarta, pasando por Moscú o Las Vegas, se congregaron en las municipalidades o en las capillas para casarse este viernes, de ser posible a las 11.11, convencidos del carácter mágico de esta fecha.
En Shanghai, China, Li Xue, una administradora hotelera de 26 años, había previsto inicialmente casarse en febrero, pero decidió adelantar la fecha. “Nos casaremos el día de los seis “1”. Vamos a dejar de ser solteros en una fecha que no ocurre más que una vez en el siglo”, confesó a AFP.
Según una tradición de los años 1990, el 11 de noviembre es considerado en China como el día de los solteros (“guanggunjie”), de los “1” solitarios que deben reunirse para celebrar.
Furor
En Las Vegas, el 11/11/11, que muchos han calificado como el Día de la Bestia, los ministros, reverendos, pastores, rabinos y sacerdotes de todo tipo que abundan en Las Vegas no dan abasto para atar los nudos matrimoniales de miles de parejas.
“Comenzamos desde la mañana, y vamos a celebrar al menos 150 matrimonios hoy, si no más”, dijo Candice, una empleada de la Pequeña Iglesia del Oeste.
Cerca de 3,200 licencias de matrimonio fueron solicitadas esta semana en Las Vegas, tres veces más que lo habitual, según un funcionario municipal citado por el periódico USA Today.
En España, la cifra 11/11/11 cayó de perillas para la organización benéfica de lotería “La Once” que ayuda a los ciegos, para recaudar unos 60 millones de euros en un sorteo único de este viernes que repartirá 11 millones de euros (15 millones de dólares) en premios.
Fuentes de La Once expresaron su “satisfacción” por el resultado del sorteo extraordinario, que puso en la calle un total de 13.5 millones de cupones para distribuir en once premios de un millón de euros y un primer premio de once millones de euros.
Sin sobresaltos
Pero, ¿por qué tanta emoción? Los numerólogos, francmasones o seguidores de las ciencias ocultas, consideran que el 11 es un “número maestro”, que es aun más poderoso cuando se multiplica por tres.
Y desde la aparición de los relojes digitales, el “11:11” fascina.
Ellie Crystal, escritora, vidente y exploradora metafísica, expresó que a ella le parecía que sus discípulos “se alineaban al unísono con el universo con esta energía mundial, que comenzó al otro lado del mundo y que llega hasta Nueva York”.
En Egipto, la pirámide de Keops, la más grande del país, fue cerrada y numerosos internautas locales hicieron “celebraciones de carácter esotérico previstas para ser efectuadas en esa fecha en la cima de la pirámide”, declaró a AFP Atef Abou Zahab, director del departamento de arqueología faraónica.
“Hay una sincronía interesante en el hecho de que muchos eventos estén asociados con el número 11”, observa Ellie Crystal, una bloguera que se presenta como una “exploradora de la metafísica del mundo”.
Según John Hoopes, profesor de pensamiento crítico en la Universidad de Kansas (centro), todas estas teorías seudocientíficas son un ejemplo perfecto del “sesgo de confirmación de la hipótesis”. Es la tendencia a privilegiar la información que confirma las ideas preconcebidas, sin tener en cuenta a aquellas que las contradicen, dijo.