28/04/2024
02:25 AM

Fortalezas españolas, la primera línea de defensa de la soberanía

Estas fortificaciones fueron construidas por los conquistadores para proteger del saqueo de los piratas los nuevos territorios de la colonia.

SAN PEDRO SULA

Las imponentes fortalezas de piedra que en su momento fueron edificadas para proteger las embarcaciones y los puertos españoles en Honduras, son ahora testigos mudos de la historia colonial y sitios turísticos visitados por nacionales y extranjeros.

En la época colonial en Honduras los españoles construyeron los fuertes San Cristóbal en Gracias, Lempira; San Fernando en Omoa, Cortés, y Santa Bárbara en Trijillo, Colón.

La fortaleza de San Fernando, conocida como castillo de Omoa, es la más importante estructura colonial de defensa en Centroamérica.

En el año de 1759 el rey Fernando VI (sexto) autorizó la construcción que terminó en 1775. Fue construido por los indígenas y algunos de los esclavos africanos, con el propósito de defenderse de los piratas. Según la historia, a mediados del siglo XVIII (18) España e Inglaterra entraron en guerra poniendo en peligro el comercio entre España y Centroamérica.

Fue la guerra, que interrumpía el comercio, lo que obligó a fortificar Omoa por los españoles en la época colonial.

En la bahía de Trujillo se edificó la fortaleza de Santa Bárbara, escenario de numerosas batallas entre los españoles y los piratas que pretendían saquearla por lo próspera que se volvió. La construcción arrancó en 1586 y se concluyó en 1629.

El espectacular fuerte de San Cristóbal fue construido en el año de 1864, en aquel entonces el presidente José María Medina inició la construcción que fue finalizada el año de 1875.

Foto: La Prensa

Cambio de administración

La historiadora, investigadora y docente de la Carrera de Historia de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras ( Unah), Yesenia Martínez, explicó que a mediados del siglo XVIII entre 1750 y 1785 se dio un cambio en la administración económica colonial en lo que hoy es América Latina y se incluye la construcción de fortalezas en los denominados puertos mayores y puertos menores ya que eran la entrada y la salida de la economía.

“Para el caso en Honduras el puerto de Omoa y Trujillo eran los únicos puertos en el periodo colonial que tenían la conexión con el Caribe y la Capitanía de Guatemala para llevar el oro, el ganado y toda la producción que aportaba la provincia de Honduras hacia España”, explicó.

La construcción de las fortalezas de San Fernando en Omoa y Santa Bárbara en Trujillo tiene que ver con la protección del comercio ante la invasión de piratas y el comercio ilícito promovido en aquel entonces por el gobierno inglés.

“En ese sentido tenemos estas edificaciones en espacios estratégicos como Gracias, en Lempira en este caso por la importancia política y de vínculos comerciales con El Salvador y Guatemala en el periodo colonial”, manifestó Martínez.

“Entonces las construcciones de las fortalezas se hicieron en un momento de reestructuración económica y fiscal del gobierno español de proteger la economía ante la presencia de colonizadores ingleses que de alguna manera querían apropiarse no solo del territorio hondureño sino también del comercio”, explicó la experta en historia.

Foto: La Prensa