Técnicos de la Dirección de Aeronáutica Civil, de la Base Aérea Armando Escalón y expertos extranjeros trabajan en la investigación del accidente del helicóptero, en el cual falleció el sábado el piloto Rommel Ortega Bueso.
Un informe preliminar del hecho ya fue enviado a la Dirección General de Aeronáutica Civil de Tegucigalpa.
Fredy Midence, inspector de aeronavegabilidad de la Dirección de Aeronáutica Civil en San Pedro Sula, aseguró que los trabajos se han realizado conforme a las necesidades técnicas con la colaboración de la Base Aérea Armando Escalón.
“Las evaluaciones finales las tendremos en el transcurso de la semana y será enviado un informe final a Tegucigalpa pues ya cuentan con el preliminar”, señaló Midence.
Agregó que equipos de extranjeros visitaron el lugar del hecho para determinar las posibles causas del accidente.
“Ya están los representantes de la fábrica del motor y de la casa distribuidora del modelo del helicóptero Bell Jet Ranger revisando el mecanismo motriz y así detallar los daños y si el equipo tuvo alguna falla antes del percance”, mencionó el inspector.
El infortunado piloto tuvo comunicación vía radio con la torre de control como lo establecen las normas de aeronáutica para solicitar permiso y poder despegar.
La comunicación fue durante unos cinco minutos antes del accidente; se desconoce si Ortega reportó problemas mientras volaba.
Midence también informó que representantes de las compañías aseguradoras llegaron ayer donde se encontraban los equipos de técnicos evaluando los daños.
Ortega fue piloto durante 15 años y perteneció a la Fuerza Aérea durante 14, terminando su trayectoria como capitán de aviación en calidad de retiro y trabajaba con una compañía privada.
Ayer fue enterrado en la capital del país.
