El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, destacó hoy al comienzo de su reunión en la Casa Blanca con su colega hondureño, Porfirio Lobo, el 'nuevo capítulo' en las relaciones entre su país y Honduras.
Ambos mandatarios comenzaron a las 15.45 hora local (19.45 GMT) una reunión que se prolongará cerca de 45 minutos y en la que abordarán, según explicaron, asuntos como la lucha contra el narcotráfico, la seguridad y la cooperación económica.
En unas breves declaraciones al comenzar la reunión, Obama resaltó la 'gran esperanza' que se abre ante el 'firme compromiso' de Honduras
con el restablecimiento de las prácticas democráticas, tras la crisis política de hace dos años y la llegada de Lobo al poder en enero de 2010 tras la celebración de elecciones.
Ello, resaltó, ha permitido un 'movimiento de vuelta hacia la comunidad internacional y el progreso en Honduras', que ha dado como resultado la readmisión del país centroamericano en la Organización de Estados Americanos (OEA) el pasado junio.
No obstante, 'queda mucho por hacer', indicó Obama, quien destacó el interés de su país en colaborar para mejorar la seguridad en Honduras y toda Centroamérica y en materia de derechos humanos.
También abordarán, indicó, cómo fortalecer el desarrollo económico y expandir el comercio.
Centroamérica es la región más violenta del mundo fuera de zonas de guerra, según la ONU, que indica que Honduras es el lugar con más homicidios en América Central, con un índice de 58 víctimas mortales por cada 100.000 personas.
Derechos humanos
El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, admitió este miércoles ante su par estadounidense Barack Obama, que su país tiene 'debilidades' en materia de derechos humanos, para lo que pidió ayuda de Washington, así como para enfrentar el narcotráfico y el crimen organizado.
'Tenemos algunas debilidades como la investigación, y en eso pues esperamos tener más ayuda de ustedes, que nos fortalezca la capacidad de investigación para determinar quiénes son los responsables de las violaciones a los derechos humanos', dijo Lobo en la Casa Blanca.
Lobo le garantizó a Obama que 'nuestra política de Estado es el respeto a los derechos humanos', en declaraciones que hicieron ambos mandatarios en el Salón Oval antes de iniciar su reunión.
Obama ofreció la ayuda estadounidense 'para asegurar que los derechos humanos se respeten en Honduras'.
Asimismo, el mandatario estadounidense se mostró interesado en discutir 'cómo podemos efectivamente enfrentar la situación de seguridad que existe no solo en Honduras
, sino en América Central, y cómo podemos cooperar para prevenir que los países centroamericanos se corrompan por el narcotráfico'.
Para combatir al crimen organizado, que ha vuelto a América Central la región más peligrosa del mundo fuera de zonas de guerra según la ONU, 'estamos con buenos amigos como ustedes que nos ayudan y nos seguirán ayudando', apuntó Lobo.
En la gira
El martes, en su primera jornada en la capital estadounidense, Lobo se reunió con la secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, con quien conversó sobre cooperación contra el crimen organizado y migración.
Napolitano ofreció apoyo técnico para incrementar la seguridad de Puerto Cortés, el principal puerto de Honduras y América Central, capacitación de la policía y tecnología para detectar armas y dinero que van al crimen organizado, según explicó el canciller hondureño, Arturo Corrales.
Estados Unidos y Honduras buscan 'incrementar el intercambio de información y reforzar la seguridad marítima y aérea para facilitar el comercio legítimo y los viajes' y combatir el narcotráfico, dijo por su parte Napolitano.
De igual forma el martes, Lobo se dirigió a la OEA en una sesión especial en su honor que hizo la organización, cuatro meses después de que readmitiera a Honduras, que pasó suspendida casi dos años.
'Los costos políticos, económicos y morales que pueden derivarse de la aplicación de sanciones no pueden ser considerados logros de la organización', dijo Lobo.