TEGUCIGALPA.
Las protestas continuas lideradas por la plataforma conformada por médicos y docentes, generó una profunda incertidumbre en la culminación del año académico público. Sin embargo, la reprogramación de clases ha dado luces a los estudiantes.
“La mayoría de instituciones educativas públicas de prebásica, básica y media a nivel nacional han estado recuperando clases los sábados y en la semana de vacaciones del Día del Estudiante las horas que se perdieron”, explicó Arnaldo Bueso, ministro de Educación.
En ese sentido, se estará finalizando el año académico la fecha que se había planificado, es decir, el 30 de noviembre y así se podrán cumplir con los 200 días de clases que exige la ley, agregó el funcionario.
Un porcentaje bajo de centros educativos no han recuperado los días perdidos. Arnaldo bueso, ministro de Educación
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Estas propuestas de recuperar las clases los fines de semana y los días feriados tiene sus raíces en el diálogo permanente entre los padres de familia, alumnos, docentes, autoridades distritales y departamentales, detalló Napoleón Bonilla, director departamental de Francisco Morazán.
Por su parte, Orlando Mejía, vicepresidente del Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros (Pricphma), manifestó que “hemos acuerpado todo este proceso de recuperación de clases y somos garantes del mismo”.
Todos los actores que integran el proceso educativo han estado comprometidos con brindar el pan del saber que les corresponde a los niños por ley, agregó el dirigente magisterial. Mientras la mayoría de los centros educativos ya están dentro de las aulas construyendo el conocimiento, un bajísimo porcentaje continua con tomas que no tienen razón de ser, señaló Bonilla. Nelson Cálix, director del Técnico Honduras, instituto que se mantuvo ayer con tomas, advirtió que si sigue la pérdida de clases, seguirán trabajando los fines de semana y hasta el 21 de diciembre.
