Epidemias que dejan las inundaciones

Cuídese de enfermedades gastrointestinales, de la piel, dengue y hasta leptospirosis. Tome las medidas de prevención

  • 11 nov 2020

San Pedro Sula, Honduras

Las aguas provocadas por la depresión tropical Eta y que inundaron a miles de hondureños ya bajaron, pero a su paso dejaron muerte, destrucción y ahora lo que viene es una gran cantidad de enfermedades.

Problemas gastrointestinales; entre ellos, diarrea, vómitos, dolor de estómago, dengue, hepatitis A, enfermedades en la piel como la dermatitis y hasta leptospirosis dejan a su paso las inundaciones debido a la humedad y las aguas contaminadas.

Las personas al regresar al hogar tienen una ardua tarea. Deben desinfectar e higienizar las paredes, los pisos y otras superficies de la casa, como las alacenas y refrigeradora, además de todos los objetos y utensilios que hayan estado en contacto con el agua contaminada; pero lo más recomendable es desecharlas, en caso de ser posible, para evitar enfermedades.

El contacto con agua contaminada se convierte en un cultivo de gérmenes que pueden ser transmitidos por medio de heridas o alimentos.

Problemas en la piel

Cándido Mejía, especialista en Dermatología, expresa que las principales enfermedades en la piel por las inundaciones son los hongos en los pies, larva migrans, verrugas o mesquinos, infecciones en la piel como impetigo y dermatitis alérgicas en la piel.

“Uno de los consejos es lavarse bien los pies con jabones desinfectantes, desinfectarse con alcohol o agua oxigenada, además de secarse los pies, aplicar talcos o crema humectante”.

El especialista recomienda que para evitar las infecciones en los pies hay que utilizar un calzado que permita transpirar al pie y evitar humedades, calcetín de fibra natural, no calentar los pies acercándolos demasiado a fuentes de calor porque propicia la aparición de sabañones.

Para los mayores y niños es aconsejable utilizar cremas específicas que preparan la piel y cierran las posibles grietas y evitar los hongos por la humedad.

Dengue y leptospirosis

El dengue, por ejemplo, es muy común después de una inundación, pues las aguas estancadas provocan el crecimiendo del mosquito Aedes aegypti, que lo transmite.

Provoca una fiebre alta que incapacita a las personas con intensos dolores de cabeza y ojos, así como de músculos, huesos y articulaciones.

Otro de los males peligrosos es la leptospirosis, y una de las mejores formas de evitarla es no caminar descalzos por el lodo y las aguas estancadas y contaminadas, ya que pueden contener orinas de ratas y animales que llevan la bacteria y en los suelos puede haber material punzante que podría provocar heridas que facilitan la infección.

Entre las enfermedades también está la hepatitis, y uno de sus principales síntomas son el amarillento, fiebre y decaimiento.

“Es posible que no se presente inmediatamente, sino en las próximas semanas, por eso es fundamental estar alerta”, sugieren los especialistas.

Qué hacer

Use solamente agua hervida o tratada con cloro para beber, cocinar y otros quehaceres.

•Bote todo alimento o agua almacenada que esté o pueda haber estado en contacto con el agua de la inundación.

•Protéjase de las picaduras de insectos utilizando repelente y ropa que cubra casi todo el cuerpo.

•Elimine las aguas estancadas de lluvia para evitar picaduras de mosquitos transmisores de malaria, dengue, zika, chikungunya y otros.

•Si debe desplazarse a una zona, hágalo durante el día, con luz natural, siempre con botas de goma.

•Tape bien los recipientes donde guarda o almacena el agua y los alimentos para evitar contaminación de roedores y otros animales.

•Evite el contacto con agua llovida estancada, utilice zapatos cerrados de goma, como botas.

•Lávese las manos con agua y jabón antes de preparar alimentos.

•Cocine bien los alimentos y cómalos recién cocinados.