Tegucigalpa, Honduras.
La industria maquiladora sigue liderando las buenas noticias de empleo en el país y confirma la ampliación de las inversiones de la multinacional estadounidense Nike.
Nike está presente en el país desde hace años, pero a través de proveedores internacionales de ropa deportiva, ocho en total en el 2015, entre ellos Delta Apparel, Star y New Holland, entre otros.
La mayoría de fábricas propias o centros logísticos, que se espera se instalen en el país, están en Asia, donde se produce el 98% del calzado.
Sin embargo, con la idea de tomar el control de su producción en el mercado americano, Nike se ha aliado con la firma de inversión Apollo Global Management para construir una red de suministro que les permita “aumentar la capacidad de fabricación regional, permitir la entrega más rápida y de más productos personalizados a los consumidores e impulsar la inversión en sostenibilidad”.
Aunque los términos económicos del proyecto no han trascendido por el momento, lo que sí se sabe es que el fondo de inversión estadounidense se ha hecho con el control de varios proveedores textiles que ya operaban en Norteamérica y Centroamérica.
Entre las recientes adquisiciones de Apollo destacan New Holland, un fabricante de ropa que emplea a 9,000 personas, y el operador logístico ArtFX.
La nueva compañía creada tiene “planes para invertir en avanzar en sus operaciones de fabricación y su experiencia para producir ropa innovadora, técnica y personalizada”, informó Nike.
New Holland cuenta en Honduras con dos plantas de producción, una ubicada en la 27 calle en San Pedro Sula y otra en la Zona Libre El Carmen, más conocida como Confecciones El Barón.
Esta maquila tiene contratos con las marcas Nike, Adidas, UA (Under Armour) y Terra Mar en la elaboración de camisetas, short, trajes de baño, pantalones, overoles, trajes de ballet, entre otros.
Mario Canahuati, presidente de la Asociación Hondureña de Maquiladores (AHM), sostiene que en Honduras el plan de Nike y Apollo es construir un centro logístico y generar 25,000 empleos directos.
La expectativa es que se cree una nueva subsidiaria del fondo Apollo, que seguirá adquiriendo otros proveedores para diversificar.
“Esto creará un ecosistema textil más integrado verticalmente, desde los proveedores de materiales y fabricantes de prendas de vestir a retoques finales, almacenaje y logística”, añaden Nike y Apollo.
La alianza con Apollo le permitirá a Nike tomar un mayor control en la totalidad del negocio, desde la producción hasta la entrega a su cliente final.
El tercer socio en esta iniciativa es, según revela el Wall Street Journal, Flextronics International Ltd., que se encargará de la automatización y personalización en la cadena de suministro.
Nike, que compite por el mercado mundial de moda deportiva con empresas de la talla de Under Armour y Adidas AG, ingresó un seis por ciento más en el último trimestre - 8.24 mil millones de dólares – aunque las ventas se mantuvieron estables en América del Norte.
El CEO más creativo
En esa negociación por consolidar sus operaciones en el continente está la mano de Mark Parker, calificado por la revista Time como “el CEO más creativo del mundo”.
Es que el presidente ejecutivo de Nike congrega a atletas de élite, artistas famosos y sus propios diseños para impulsar un negocio con una facturación anual de 30,000 millones dólares.
“Nuestra oficina habla por nosotros y nos señala acusando nuestra forma de ser. La fantasía y la creatividad exuberante se vuelcan sin orden en los muebles que nos rodean y es así como recibimos a las visitas”, dice el propio Parker.
“Al ser diseñador”, comenta, “muchas de las personas que frecuento son creativas. Me gusta la excentricidad, que me sorprendan”.
Agrega que, ya sean artistas o deportistas, le atrae la gente “intensa, incluso obsesiva.
La irreverencia me inspira”. Y no, no controla el precio de las acciones de Nike todos los días, no se inquieta por los informes trimestrales de la situación financiera de la empresa, ni trata de manipular el ciclo de noticias, sean cuales fueren los líos en que se hayan metido sus obsesivos deportistas.
Es que la actitud obsesiva es una constante en la vida de Parker.
En la adolescencia, cuando corría maratones, modificaba constantemente sus zapatillas en busca de un mejor rendimiento.
Ahora, los diseños están tan incorporados al éxito de la empresa que ya ha perdido la cuenta de la cantidad de patentes que tiene registradas.
Tenis que se amarran solos
Parte del proceso creativo e innovación fue la presentación, en marzo anterior, de los primeros tenis que se amarran solos y que permite a sus usuarios el sentir el calzado más suelto o ajustado apretando botones en los lados.
Los tenis tienen un sistema antiadherente que utiliza una tecnología para evitar que el barro se pegue a las suelas de las zapatillas de fútbol.
“Hemos entrado en una nueva era para el rendimiento personalizado”, dijo Mark Parker. “Hoy en día, los atletas quieren algo más que un tablero de instrumentos.
'Ellos quieren una relación”.
El potencial de los zapatos con cordones de adaptación es enorme, pues se ajusta a la medida del pie.
Cuando la persona se coloque el zapato deportivo, su talón llegará a un sensor.
El atleta deberá presionar dos botones en los lados que ajustarán el agarre.
Para el futuro, Nike indicó que trabajarán en un sensor que detectará el pie y se ajuste de manera automática.
Nike HyperAdapt 1.0 estará a la venta desde la próxima temporada navideña y solo estará disponible para los usuarios del Nike app. Estará disponible en tres colores.
El precio no fue revelado.
Las innovaciones llegan en el momento que Nike está enfocado en llegar a la meta de $50,000 millones en ganancias anuales para el año fiscal de 2020.
La compañía reportó $30,600 millones en ganancias en el pasado año fiscal que culminó en mayo.
