Las pérdidas económicas que dejaron las tormentas ocurridas hace tres semanas ascienden a más de L120 millones. Los excampos bananeros siguen con agua y lodo.
Al menos 600 personas de la aldea Lupo Viejo, Bajos de Choloma, se encuentran incomunicados por el desborde del canal Maya, que es un alivio para las aguas del Chamelecón y el Ulúa.