Mientras pierde fuerza la gélida tormenta que ha congelado al país en plenas Navidades, Estados Unidos intenta recuperarse de los estragos provocados por el frente ártico que se ha llevado la vida de más de 50 personas, la mitad en la zona de Búfalo, en el estado de Nueva York.
El de Tampa tuvo que cancelar 30 vuelos de llegada, también el 9 %, mientras que en el Fort Lauderdale, a unos 40 kilómetros al norte de la ciudad de Miami, dejó de recibir 26 de los programados, el 5 %.