La presidencia de la Celac ejercida por la presidente Xiomara Castro no dejó de enfrentar dificultades, sobre todo cuando planteó reuniones de urgencia.
La influencia es real. Se inició en 2017, ha llevado a 40 empresas chinas al país (la mitad de ellas ubicadas en la Zona Libre de Colón) e incluye una ambiciosa –y exitosa– estrategia de poder blando.