El empresario colombiano Álex Saab, supuesto testaferro de Nicolás Maduro extraditado el sábado a EEUU, donde será juzgado por un caso de lavado de dinero, aseguró, a través de una carta, que no tiene “nada que colaborar” con el país norteamericano y que no cometió ningún delito, según el escrito leído este domingo por su esposa, Camila Fabri.
Tras la detención, en junio del año pasado, Venezuela aseguró que el empresario es un ciudadano venezolano y un “agente” del Gobierno que se hallaba “en tránsito” en Cabo Verde, por lo que sus abogados sostuvieron que “tenía derecho a la inviolabilidad personal como enviado especial de Venezuela”.El Gobierno venezolano ha considerado la extradición de Saab como un “secuestro” e interrumpió el diálogo político con la oposición que comenzó en agosto en México.