Un accidente en la carretera del norte de Honduras a la altura de Amareteca, deja al menos tres personas muertas y cuatro heridas reportan las autoridades de la Policía Nacional de Honduras.
Un trágico accidente en el kilómetro 18, en la carretera que de la capital conduce al norte del país, dejó tres personas fallecidas y cuatro lesionadas, entre ellos dos menores de edad.
Eran alrededor de las 10:05 am cuando el pick up Nissan Navara oro con placas PDF 3686 se accidentó y acabó con la vida de los hermanos Walter Banegas Pineda (34) y Jessica Banegas Pineda (19), originarios de Las Posas, Marcovia, Choluteca. También falleció Josué Alexander Lezama Hernández (18), residente y originario del mismo sector.
En el percance resultaron lesionados Concepción Santos (28), Mario Bonilla (73) y dos menores de edad de 4 y 7 años. Todos ellos fueron trasladados al Hospital Escuela.
El motorista del vehículo, quien salió ileso en el percance, fue identificado como Juan de Dios Bonilla (35), originario de El Puente Siete, Nacaome, y residente en Guaymas, El Progreso.
El accidente
La fatalidad comenzó cuando a eso de las 5:00 am las personas comenzaron su viaje a la zona norte. Los hermanos Banegas Pineda y Lezama Hernández aprovecharon que Bonilla iba de regreso a la ciudad de El Progreso para pedirle aventón a San Pedro Sula, ciudad donde laboraban en una empresa maquiladora.
Al llegar al kilómetro 18, a inmediaciones de Amarateca, Francisco Morazán, una de las llantas traseras del automotor estalló, por lo que Bonilla perdió el control de la unidad y dejó el mortal saldo. “Estalló la llanta trasera del carro.
Iba aproximadamente a 70 kilómetros por hora cuando perdí el control del carro y nos estrellamos”, dijo el conductor del vehículo en medio del desconsolado llanto. El automotor se dio vuelta en una cuneta en la orilla de la carretera.
Los infortunados que habían pedido jalón a San Pedro Sula iban en la paila del vehículo y al impactar contra el paredón en la orilla de la calzada salieron disparados y sus cuerpos quedaron tirados en la cuneta.
“Solo sentimos que el carro se hacía para un lado y (para) otro y ya por último nos estrellamos”, dijo Concepción Santos, esposa del conductor del automotor, quien resultó lesionada junto con su hijo. “íbamos para El Progreso a visitar unos familiares y los muchachos nos pidieron jalón. Los buses no los querían traer porque venían llenos y nos pidieron que aunque sea en la paila les hiciéramos el favor porque iban a trabajar a las maquilas”, agregó.
Al lugar del percance se hicieron presentes las autoridades de la Dirección Nacional de Tránsito, el Cuerpo de Bomberos y la Cruz Roja.
Tegucigalpa. Encontraron la muerte cuando regresaban a casa después de celebrar con sus familias las fiestas de fin de año.
Un trágico accidente en el kilómetro 18, en la carretera que de la capital conduce al norte del país, dejó tres personas fallecidas y cuatro lesionadas, entre ellos dos menores de edad.
Eran alrededor de las 10:05 am cuando el pick up Nissan Navara oro con placas PDF 3686 se accidentó y acabó con la vida de los hermanos Walter Banegas Pineda (34) y Jessica Banegas Pineda (19), originarios de Las Posas, Marcovia, Choluteca. También falleció Josué Alexander Lezama Hernández (18), residente y originario del mismo sector.
En el percance resultaron lesionados Concepción Santos (28), Mario Bonilla (73) y dos menores de edad de 4 y 7 años. Todos ellos fueron trasladados al Hospital Escuela.
El motorista del vehículo, quien salió ileso en el percance, fue identificado como Juan de Dios Bonilla (35), originario de El Puente Siete, Nacaome, y residente en Guaymas, El Progreso.
El accidente
La fatalidad comenzó cuando a eso de las 5:00 am las personas comenzaron su viaje a la zona norte. Los hermanos Banegas Pineda y Lezama Hernández aprovecharon que Bonilla iba de regreso a la ciudad de El Progreso para pedirle aventón a San Pedro Sula, ciudad donde laboraban en una empresa maquiladora.
Al llegar al kilómetro 18, a inmediaciones de Amarateca, Francisco Morazán, una de las llantas traseras del automotor estalló, por lo que Bonilla perdió el control de la unidad y dejó el mortal saldo. “Estalló la llanta trasera del carro.
Iba aproximadamente a 70 kilómetros por hora cuando perdí el control del carro y nos estrellamos”, dijo el conductor del vehículo en medio del desconsolado llanto. El automotor se dio vuelta en una cuneta en la orilla de la carretera.
Los infortunados que habían pedido jalón a San Pedro Sula iban en la paila del vehículo y al impactar contra el paredón en la orilla de la calzada salieron disparados y sus cuerpos quedaron tirados en la cuneta.
“Solo sentimos que el carro se hacía para un lado y (para) otro y ya por último nos estrellamos”, dijo Concepción Santos, esposa del conductor del automotor, quien resultó lesionada junto con su hijo. “íbamos para El Progreso a visitar unos familiares y los muchachos nos pidieron jalón. Los buses no los querían traer porque venían llenos y nos pidieron que aunque sea en la paila les hiciéramos el favor porque iban a trabajar a las maquilas”, agregó.
Al lugar del percance se hicieron presentes las autoridades de la Dirección Nacional de Tránsito, el Cuerpo de Bomberos y la Cruz Roja.
