Debido al avanzado estado de descomposición en el que fue encontrado en el barrio El Faro de Puerto Cortés, los familiares de la hondureña Eda Alfaro esperarían hasta tres meses para velar y sepultar su cadáver.
Fue a través de un medio de comunicación televiso que los dolientes relevaron que, al menos de momento, la respuesta que recibieron por parte de Medicina Forense es que la autopsia demorará más de lo habitual.
La razón es que, según dijeron, al cuerpo se le practicará una prueba de ADN con una muestra tomada a su padre para confirmar si verdaderamente se trata de ella o no.
No obstante, Dilcia Alfaro, prima de la mujer de 33 años, aseguró que los seres queridos de la víctima tienen certeza de que el cadáver hallado en el solar baldío ayer por la tarde sí es el de Eda.
“Nosotros identificamos el cuerpo de mi prima por las características del cuerpo, los rasgos, el calzada y la gargantilla que ella andaba. Lo que nosotros le pedimos a las autoridades es que agilicen este caso y nos ayuden, que nos entreguen el cuerpo”, manifestó.
La hondureña había salido de su casa rumbo a una iglesia, pero desde ese momento no se supo nada de ella, hasta que el martes 23 de agosto de 2022 fue hallada en Puerto Cortés, ciudad hermana de donde ella residía, Omoa.
Su familia en reiteradas ocasiones denunció una supuesta pasividad por parte de las autoridades de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Entre tanto, las razones del crimen aún se desconoce y quiénes fueron los responsables también es un misterio para la Policía.
Persona cercanas a la fallecida revelaron que ella era madre de un pequeño niño, quien apenas unos días después de su desaparición iba a cumplir años; ahora el pequeño llora la pérdida de su madre y crecerá sin la compañía de su progenitora.
