La Ceiba, Atlántida
Un padre e hijo fueron brutalmente asesinados por sujetos desconocidos en un sector aledaño del municipio de El Porvenir, Atlántida.
En el hecho criminal, que sucedió a primeras horas del sábado en el sector conocido como López Bonito cerca del río Bonito, perdieron la vida Santos Andrés Hernández y su hijo Rigoberto Hernández Ochoa.
El cuerpo de Santos Andrés fue encontrado por parientes hasta en horas de la tarde de ese mismo día en el interior de la vivienda adonde residía; pero el cadáver de su hijo fue encontrado ayer domingo en horas de mañana a orillas del río Bonito.
En una zona desolada queda el lugar adonde ocurrieron los hechos. Las autoridades de Medicina Forense, Ministerio Público y de la Dirección Nacional de Investigación Criminal levantaron el primer cuerpo hasta en horas de la noche.
Unidades de inteligencia de la Policía Preventiva continuaron con la búsqueda del segundo cuerpo que fue reconocido ayer en horas de la mañana.
En la primera escena, el cadáver de Santos Hernández estaba tirado sobre un charco de sangre en el interior de la vivienda, presentaba varias heridas de arma de blanca y un balazo en la frente, informaron las autoridades policiales.
El cadáver de Rigoberto Hernández fue encontrado a unos 200 metros de la vivienda, a orillas del río Bonito, presentaba varios balazos; a unos siete metros de su cuerpo, las autoridades encontraron varios casquillos de bala calibre desconocido.
Parientes de las víctimas indicaron que hace unos seis meses ellos vivían en esta zona desolada.
Se dedicaban a la agricultura luego que el dueño de la propiedad se las había facilitado para que la cultivaran y se la cuidaran.
Hasta los momentos, las autoridades policiales no tienen claros los motivos y hechores de este doble crimen. Prometieron seguir con las investigaciones.
Un padre e hijo fueron brutalmente asesinados por sujetos desconocidos en un sector aledaño del municipio de El Porvenir, Atlántida.
En el hecho criminal, que sucedió a primeras horas del sábado en el sector conocido como López Bonito cerca del río Bonito, perdieron la vida Santos Andrés Hernández y su hijo Rigoberto Hernández Ochoa.
El cuerpo de Santos Andrés fue encontrado por parientes hasta en horas de la tarde de ese mismo día en el interior de la vivienda adonde residía; pero el cadáver de su hijo fue encontrado ayer domingo en horas de mañana a orillas del río Bonito.
En una zona desolada queda el lugar adonde ocurrieron los hechos. Las autoridades de Medicina Forense, Ministerio Público y de la Dirección Nacional de Investigación Criminal levantaron el primer cuerpo hasta en horas de la noche.
Unidades de inteligencia de la Policía Preventiva continuaron con la búsqueda del segundo cuerpo que fue reconocido ayer en horas de la mañana.
En la primera escena, el cadáver de Santos Hernández estaba tirado sobre un charco de sangre en el interior de la vivienda, presentaba varias heridas de arma de blanca y un balazo en la frente, informaron las autoridades policiales.
El cadáver de Rigoberto Hernández fue encontrado a unos 200 metros de la vivienda, a orillas del río Bonito, presentaba varios balazos; a unos siete metros de su cuerpo, las autoridades encontraron varios casquillos de bala calibre desconocido.
Parientes de las víctimas indicaron que hace unos seis meses ellos vivían en esta zona desolada.
Se dedicaban a la agricultura luego que el dueño de la propiedad se las había facilitado para que la cultivaran y se la cuidaran.
Hasta los momentos, las autoridades policiales no tienen claros los motivos y hechores de este doble crimen. Prometieron seguir con las investigaciones.
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 Santos Hernández.
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