¿Cuándo iniciarían los trabajos en cárcel de La Acequia?

La Acequia, Santa Bárbara.

En tres mes comenzarían los trabajos para finalizar la construcción del abandonado centro penal en La Acequia, en Santa Bárbara.

Actualmente la Secretaría de Defensa se encuentra en la fase de reconocimiento de terreno con la finalidad de trazar una ruta en un proyecto que tiene un porcentaje considerable de avance.

Demoler lo construido, para iniciar desde cero, no está en los planes. “El PCM manda a finalizar, así se hará”, argumentó José Manuel Zelaya, titular de la Secretaría de Defensa, a este medio.

LA PRENSA Premium realizó un recorrido por la obra, abandonada desde 2016 para evidenciar las deprimentes condiciones en las que encuentra.

Presentado en su momento bajo el nombre de “Centro Penitenciario Regional de San Pedro Sula” y promocionado para ser el más grande de Centroamérica, la cárcel en La Acequia -conocida también como centro penal de Naco-, nunca tomó forma.

Abandonado desde 2016 por decisiones políticas, el proyecto que inició monseñor Rómulo Emiliani a mediados de 2006 (con la conformación del comité para su construcción) ha sido victima del paso del tiempo y las condiciones climáticas.

Con un presupuesto inicial asignado en su momento de 1,400 millones de lempiras, según estimaciones del gobierno anterior, el complejo sería un espectacular recinto con la capacidad de retener 3,298 privados de libertad de máxima, mediana y baja peligrosidad en tres diferentes cárceles ubicadas estratégicamente en un espacio de 110 manzanas de tierra.

En las promesas también estaba el primer parque industrial penitenciario en Honduras en un espacio de 72 manzanas de tierra para la industria carcelaria.

Además, en los diseños se incluían edificios administrativos, habitaciones para policías penitenciarios, armería, estacionamientos, canchas, cocinas, clínicas, talleres, aulas de clases, área de visitas y áreas destinada para la agricultura.

Todo estaría bajo la responsabilidad de la empresa Evaluación, Desarrollo y Gestión (Edge), contratada con fondos de la Tasa de Seguridad.

De todo el proyecto, valorado en 1,400 millones de lempiras, solo se avanzó 17 por ciento -ejecutado por el comité proconstrucción-, que se tradujo en una inversión de 196 millones de lempiras.

Todo lo demás quedó en diseños, que tampoco fueron pagados a la empresa y rondan los 96 millones de lempiras.

En el recorrido realizado por LA PRENSA Premium se evidenció que ese pequeño avance está totalmente descuidado, la maleza hizo lo propio en los espacios abiertos, mientras la lluvia oxidó las edificaciones de metal que se pudren al paso de los días.

Algunos tramos de concreto están rajados producto de las lluvias y estar prácticamente a la intemperie durante siete largos años.

En los edificios a medio ejecutar se pueden observar materiales dañados por el abandono, como láminas de metal, vigas, cemento, canaletas, entre una gran cantidad de suministros.

Gracias al inmenso cerco y la protección de guardias de seguridad las 110 manzanas no han sido perpetradas por invasores que en algún momento tenían deseos de internarse en el terreno destinado para la cárcel

Fue hasta hace menos de tres semanas que devolverle la vida al proyecto retomó fuerza con el Decreto Ejecutivo Número PCM 28-2023 publicado en el diario oficial La Gaceta el 23 de junio del 2023.

En el escrito se ratificó el “Estado de emergencia en el sistema penitenciario nacional”, debido al terrible asesinato de 46 privadas de libertad en la Penitenciaría Nacional de Adaptación Femenina (PNFAS).

De este decreto nació el PCM 29-2023 en el que se autorizó a las Fuerzas Armadas de Honduras para que mediante el proceso de contratación directa pueda proceder a la compra y adquisición de los bienes, suministros y servicios para “la construcción del Centro Penitenciario de Máxima Seguridad en las Islas del Cisne, departamento de Islas de la Bahía, y finalización de la construcción del Centro Penal de Naco, departamento de Cortés”.

LA PRENSA Premium le consultó al titular de la Secretaría de Defensa, José Manuel Zelaya, si estaba en los planes, demoler totalmente los avances en el presidio de La Acequia para comenzar desde cero y respondió que el mandato presidencial era “finalizar” y así se haría.

Zelaya argumentó que tanto para el proyecto en la Isla del Cisne como en Santa Bárbara “estamos en la fase de reconocimiento de terrenos, áreas, para así saber una ruta a seguir y los interesados puedan plantear sus propuestas, planos, etc, todo en el marco, como bien dice el PCM, a lo establecido en la ley de contratación del Estado”.

El titular de Defensa ratificó que en el caso de la cárcel de Naco, el mandato es “finalizarla”.

Zelaya no desestimó continuar la misma línea que llevaba el proyecto con la empresa Edge. “Si se vuelven a presentar ofertas en ese sentido y es la mejor en relación a costos y propuestas técnicas, para cumplir, se estudiaría al igual que demás propuestas que puedan llegar”.

El funcionario no precisó el tiempo de culminación de los proyectos ya que apenas están en la fase de reconocimiento, aunque aprobó que en un lapso de tres meses es prudente para iniciar los trabajos en el centro penitenciario de La Acequia.

Rubén Darío Pacheco, alcalde de Quimistán, Santa Bárbara, rechazó por completo la culminación o reconstrucción de la cárcel de La Acequia, alojada en medio del motor económico e industrial del municipio y del departamento patepluma.

Para el jefe edilicio de afiliación al partido Libertad y Refundación (Libre), la presidenta Xiomara Castro y los ministros involucrados en el tema de seguridad deben reconsiderar erigir esa, o la cárcel que sea, en un sitio que esté más retirado de la población.

Citó, para el caso, que el recinto de La Acequia se localiza en un sitio estratégico del municipio porque está en el valle de Naco y que aloja la única zona industrial del departamento de Santa Bárbara.

“Ya impacta negativamente, porque tener dos centros carcelarios en el departamento de Santa Bárbara implica que luego nosotros no nos volvemos atractivos para las inversiones, que esos espacios en donde se construyen las cárceles se vuelven espacios inseguros en los territorios. Nosotros hacemos un llamado a la presidenta para que reconsideren, y que no nos dejen dos centros carcelarios en el departamento”, expresó casi en tono desesperado.

Debido a que la obra ya está levantada aunque inconclusa, así que el municipio propone que se destine para otro tipo de proyecto, por ejemplo un Centro de Formación Técnica, y que además se construya en el predio un hospital nuevo, que incluya una guardería y un centro de atención integral al adulto mayor.

Señaló que hay demasiadas personas viviendo en torno al recinto carcelario que ha pasado todo este tiempo en total abandono.

“Hay otros espacios de territorio del país en donde no hay poblaciones, en donde no hay inversión, como lo hay en la zona industrial del valle de Naco, que podrían albergar un centro carcelario. Sí entendemos la urgente necesidad de atender el tema carcelario del país y que se ponga orden, como ya lo está haciendo el gobierno, pero que busquemos los espacios adecuados y que no vayamos a los territorios que están en un ascenso de su desarrollo y que vayamos a detener un poco o a dañarlo con cuestiones de ese tipo”, expuso Pacheco.

Para dimensionar la magnitud del impacto que causará la culminación de la cárcel en La Acequia, el alcalde citó que todos los días en ese sector circulan 25,000 empleados que laboran en la zona industrial del valle de Naco.

“Esa es la zona más industrializada de todo el occidente del país. Además de eso, hay proyecciones de inversión que de repente se van a detener en función de que se vuelve un sitio un tanto más inseguro alrededor de las cárceles”, advirtió.

En esa zona hay 19 comunidades que concentran más de 12 mil personas que viven en los alrededores, y que también, al igual que Ilama, que aloja El Pozo, van a tener en un entorno cercano un sitio que nadie le agrada. “Nadie quiere tener una cárcel cerca”, afirmó.

Y añadió: “Nosotros rechazamos ese proyecto en nuestro territorio. Sabemos que la presidenta tiene las ganas de solventar el tema carcelario y están haciendo esfuerzos para hacerlo, pero que se reconsidere hacerla en Naco”.

A raíz de las preocupaciones recogidas en las comunidades, el alcalde junto a autoridades de Gobernación y varios diputados se desplazaron a Tegucigalpa para solicitar una audiencia con la mandataria y el ministro de Defensa a fin de plantear una propuesta de reconvertir el proyecto en una obra de beneficio social.